¿Podrían las Piedras en las Amígdalas Ser la Razón por su Mal Aliento?

Historia en Breve

  • Las piedras de amígdalas (tonsilolitos) se forman cuando las bacterias, partículas de comida y otros residuos se acumulan en los canales de sus amígdalas, entonces se convierte en una endurecida masa calcificada
  • Los bultos duros, blancos o amarillos atraen bacterias que contienen azufre que liberan un olor desagradable, causando mal aliento
  • Las piedras de las amígdalas por lo general se pueden eliminar con un hisopo de algodón o un dispositivo de limpieza con hilo dental y agua
  • Hacer gárgaras con agua salada también puede ayudar a eliminar los desechos y eliminar las piedras

Por el Dr. Mercola

¿Ha notado un pequeño bulto, duro de color blanco o amarillo en la parte posterior de su garganta y se preguntó qué es? Puede parecer o sentirse como un pedazo de palomitas se quedó atorado en la parte posterior de la garganta, pero lo que podría ser, más bien, es una piedra de las amígdalas.

Las piedras de las amígdalas o tonsilolitos, son "estructuras calcificadas que se desarrollan en sus criptas amigdalina."1 En otras palabras, se forman cuando las bacterias, partículas de comida y otros residuos se acumulan en los canales (o "criptas") de las amígdalas, posteriormente se endurecen en una masa calcificada.

Mientras que muchas personas experimentan piedras en la amígdala, no todo el mundo las notara porque las piedras a menudo son demasiado pequeñas para verse. Simplemente puede llegar a tragar la masa y ni siquiera saber que estaba allí. Sin embargo, crece lo suficientemente grande que puede causar malestar, dolor de garganta, dolor de oído, tonsilolitis y otro síntoma desagradable: el mal aliento.

¿Tiene Mal Aliento Debido a las Piedras en las Amígdalas?

Si tiene mal aliento inexplicable, es posible que las piedras de las amígdalas sean las culpables. Se ha dicho que las piedras de las amígdalas afectan del 16 al 24 por ciento de los pacientes, aunque al parecer ya se están detectando con mucha más frecuencia en la práctica clínica.

Un estudio encontró que en realidad cerca del 40 por ciento de los pacientes tenía piedras en las amígdalas, aumentado su prevalencia con la edad (y presentándose con mayor frecuencia en las personas mayores de 50 a 69.2 Los pacientes tenían un promedio de 18 piedras cada uno, con tamaños que oscilaban de 1 hasta 10 milímetros (mm).

A pesar de su prevalencia, sus causas exactas siguen siendo un misterio, y se han realizado pocos estudios de investigación para saber las causas, tal vez porque las piedras por lo general no son consideradas peligrosas. Sin embargo, se sabe que causan mal aliento, cortesía de las bacterias con azufre que contienen.

En un estudio realizado por investigadores de la Universidad Estatal de Campinas Brasil, se detectaron piedras en las amígdalas en el 75 por ciento de los pacientes con tonsilolitis que tenían mal aliento pero en sólo en el seis por ciento de los que tenían respiración normal.3 Los investigadores concluyeron:4

"La presencia de un tonsilolito representa un riesgo diez veces mayor de (compuestos volátiles de azufre) halitometry VSC anormal y puede ser considerado como un factor predecible para halitometry anormal (mal aliento)..."

Dicho esto, mientras que las piedras en la amígdalas pueden contribuir al mal aliento, siguen siendo una causa relativamente menor. El Dr. Toshihiro Ansai, profesor asociado en Kyushu Dental College en Japón, que ha estudiado la conexión, le dijo a The New York Times:5

"La mayoría de la halitosis es causada por enfermedades periodontales y recubrimiento de la lengua... Un tonsilolito es una causa menor."

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Las Piedras en las Amígdalas Son Biopelículas Vivas

Es importante entender que las piedras en las amígdalas no son masas simplemente inertes; son biopelículas vivas que se han mostrado respirar oxígeno y nitrato.6 Las piedras en las amígdalas incluso han sido comparadas con los corales de mar, porque están fuertemente integrados por bacterias anaerobias. Como lo reporto el Dr. Harold Katz en The Huffington Post:7

"Estas (bacterias anaerobias) prosperan en azúcares y las partículas de alimentos que están presentes en la boca. Esta capa se conoce como biopelícula, que es una red espesa de microorganismos vivos. Debajo de esta película, se crean piedras compuestas de colágeno y bacterias muertas."

Aunque no he sabido de ninguna investigación que se haya realizado al respecto, lo más probable es que las piedras de las amígdalas se ven afectadas por la salud de su microbioma oral. Para lograr una buena salud oral es necesario promover el equilibrio entre las bacterias en la boca.

El microbioma oral, si bien está conectado al microbioma intestinal, es bastante único. Lo más importante es que cuanta con un componente protector que lo protege de los virus mortales y bacterias en el medio ambiente. La segunda función del microbioma oral es iniciar la digestión.

Curiosamente, los probióticos no funcionan en la boca, así que no es tan simple como añadir más microbios beneficiosos. Como paso inicial, necesita dejar de matar los microbios en la boca.

Esta es la razón por la cual los agentes antimicrobianos y los enjuagues bucales con alcohol diseñados para "matar las bacterias malas" en realidad hacen mucho más daño que bien. Si tiene piedras en las amígdalas, incluso la Clínica Mayo recomienda no utilizar un enjuague bucal a base de alcohol.8

Una mejor opción puede ser agregar vegetales fermentados a su alimentación. Estos están llenos de flora amigable que no sólo mejoran la digestión, sino también alteran la flora en la boca.

Y cuando se hacen con el uso de un cultivo adecuado, los vegetales fermentados son una excelente fuente de vitamina K2. Desde que agregue vegetales fermentados a mi alimentación, mi placa ha disminuido en un 50 por ciento y es mucho más suave, por lo que es posible que también pueda beneficiar a las piedras en las amígdalas

¿Qué Otras Cosas Aumentan el Riesgo de Piedras en las Amígdalas?

Usted tiene mayor probabilidad de desarrollar piedras en las amígdalas si tiene amígdalas grandes, y en algunas personas estas tienden a aparecer después de una enfermedad, como la faringitis. Si sufre de sequedad en la boca, que puede ser causada por muchos medicamentos recetados, esto también aumenta el riesgo, ya que permite que las bacterias anaeróbicas prosperen.9

La mala higiene dental también es un factor de riesgo, por lo que cepillarse los dientes dos veces al día (asegúrese de también cepillarse la lengua) y usar hilo dental, junto con limpiezas regulares por un dentista e higienista biológico, ayudará a asegurar una buena salud oral.

Igualmente importante es llevar una alimentación saludable y evitar los azúcares y alimentos procesados. Si desarrolla piedras en las amígdalas, por lo general se pueden eliminar con un hisopo o dispositivo de limpieza con hilo dental y agua. Hacer gárgaras con agua salada también puede ayudar a limpiar los desechos y desalojar las piedras.

Si bien la eliminación de las amígdalas (amigdalectomía) a veces se recomienda para las piedras en las amígdalas, esto conlleva un riesgo significativo de dolor y sangrado y sólo debe utilizarse como último recurso, en el peor de los casos.

Si las Piedras en las Amígdalas No Son la Causa de Su Mal Aliento ¿Qué Será?

La halitosis o mal aliento, es normalmente causada por enfermedades sistémicas, trastornos gastrointestinales y/o del tracto respiratorio superior y del metabolismo microbiano de la lengua, saliva o placa dental—que son indicadores de un desequilibrio sistémico.

Como se mencionó, la clave para remediarlo es hacer cambios en su alimentación y cuidado dental apropiado. En primer lugar, evitar los azúcares y alimentos procesados, también ayudara a prevenir la proliferación de las bacterias que causan la caries y olor. Si necesita refrescar el aliento, pruebe las siguientes siete opciones naturales:

1. Pepino: Colocar una rodaja de pepino en la parte superior de la boca puede ayudar a eliminar las bacterias que causan el olor en la boca. De acuerdo con los principios de la Ayurveda, comer pepinos también puede ayudar a liberar el exceso de calor en el estómago, que se dice que es una causa principal del mal aliento.10

2. Vinagre de sidra de manzana: Hacer gárgaras con vinagre de sidra de manzana diluido puede ayudar a eliminar el mal aliento y blanquear los dientes. Sin embargo, tenga en cuenta que el vinagre de sidra de manzana es muy ácido.

El ingrediente principal es el ácido acético, que es bastante duro, así que asegúrese de  siempre diluirlo con agua antes de tragar. Tomar vinagre de sidra manzana puro, podría dañar el esmalte de los dientes o los tejidos de la boca y garganta.

3. Menta: Las hojas de menta en polvo se han utilizado históricamente para refrescar el aliento y blanquear los dientes; incluso puede agregar una o dos gotas de aceite de menta directamente en su pasta de dientes para hacerla refrescante.

4. Oil Pulling: Enjuagarse la boca y los dientes con aceite de coco alrededor de la boca puede ayudar a refrescar el aliento. Un estudio encontró que el oil pulling es tan eficaz como el enjuague bucal para mejorar el mal aliento y disminuir los microorganismos que pueden causarlo.11

5. Masticar palos: Masticar palitos o simplemente ramitas de árboles tiene propiedades antimicrobianas. Históricamente, un extremo deshilachado sería utilizado como un cepillo de dientes para cepillar los dientes, mientras que un extremo puntiagudo sirve como un palillo de dientes.

Se han utilizado muchas especies de árboles para masticar palos, incluyendo árbol de té, canela, mango y la madera de perro, aunque el neem probablemente es el más conocido. Si le gusta mucho esta práctica, hoy en día es muy popular y su uso incluso es sugerido por la Organización Mundial de la Salud (WHO).

6. Té verde: El té verde ha demostrado ser muy útil para reducir el mal aliento. Los investigadores concluyeron que "el té verde es muy eficaz para reducir temporalmente el mal olor bucal debido a sus actividades desinfectantes y desodorantes, mientras que otros alimentos no fueron tan eficaces."12

7. Masticar perejil: el color verde brillante del perejil y el sabor "verde" pastoso provienen de sus altos niveles de clorofila. Este compuesto tiene propiedades antibacterianas y desodorizantes. Un estudio realizado en 1950 por el Dr. Howard Westcott encontró que 100 miligramos (mg) de clorofila neutralizó el mal aliento y los olores de la transpiración, menstruación, orina y las heces.13