Vacuna Contra la Gripe: El Terrible “Error del Sistema Inmunológico” que Millones de Personas Cometerán Este Año

Vacuna Contra la Gripa

Historia en Breve

  • Una nueva investigación publicada en Journal of Virology encontró que las vacunas contra la gripe estacional podrían debilitar el sistema inmunológico y aumentar potencialmente sus posibilidades de contraer otros virus de la influenza
  • Los niños que no recibieron la vacuna contra la gripe produjeron naturalmente más anticuerpos contra una mayor variedad de cepas de influenza en comparación con los niños vacunados
  • Hay muchas preguntas sin respuesta sobre si las vacunas contra la gripe son seguras y efectivas o no, ya que cada vez mas estudios están publicando lo contrario
  • Es principalmente el estado de su salud y sistema inmunológico el que determina si se enferma o no después de estar expuesto a los organismos virales o bacterianos relacionados con las enfermedades infecciosas como la gripe. Aunque llevar una estilo de vida saludable reforzará su inmunidad, las vacunas pueden ser inmunosupresoras

Por el Dr. Mercola

Antes de decidir si administrar la vacuna contra la gripe en usted o sus hijos, tómese unos cuantos minutos para echarle un vistazo a las investigaciones sobre su eficacia y seguridad.

Lo que encontrará podría influir en su decisión.

Un ejemplo de esto es una nueva investigación publicada en Journal of Virology1 que encontró que las vacunas contra la gripe estacional podrían debilitar el sistema inmunológico y aumentar sus posibilidades de contraer otros virus de la influenza no incluidos en la vacuna.

Además, cuando se compararon las muestras de sangre de 27 niños sanos, no vacunados y 14 niños que habían recibido su vacunación anual, el grupo no vacunado desarrolló naturalmente más anticuerpo contra una mayor variedad de cepas de influenza en comparación con el grupo vacunado.

Desafortunadamente, el patrón con muchos médicos de promover fuertemente las vacunas, incluyendo la vacuna contra la gripe, es primero “vacunar” y después hacer las preguntas.

La verdad es que hay muchas preguntas sin respuesta sobre si las vacunas contra la gripe son o no seguras y efectivas, pero los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de los Estados Unidos las recomienda en todas las personas de más de 6 meses de edad.

Como lo informó ABC News,2 el autor principal del estudio señaló:

La vacunación anual contra la influenza… podría tener desventajas potenciales que habían sido subestimadas y que también son un tema de debate”.

Advertencia: Todas las Vacunas Comprometen la Inmunidad Natural

Mientras más estudios hay sobre las vacunas, más evidente se vuelve que hace falta realizar adecuadamente más estudios sobre este tema, como lo explica el pediatra y experto en vacunación, Larry Palevsky.

Existe una gran diferencia entre la inmunidad adquirida naturalmente y la inmunidad inducida por las vacunas.

Obtener la inmunidad de forma natural tiene mucho más beneficios, pero este hecho parece ser ignorado por completo en los Estados Unidos, al considerar que en el país se recomienda que los bebés reciban 26 dosis de vacunas antes del año de edad (lo que, por cierto, es el doble de vacunas que reciben los bebés en países con Suecia y Japón).

Cuando un niño nace, desarrolla una inmunidad natural contra una gran variedad de microorganismos que puede llegar a respirar, comer o tocar.

Las respuestas inmunológicas iniciadas por las células que cubren las vías respiratorias, la piel y los intestinos son muy importantes en la creación de “memoria” y protección contra los microorganismos con los que entramos en contacto todos los días.

Esa es la primera línea de defensa y es un paso muy importante en la maduración del sistema inmunológico del niño – y esta primera línea de defensa desaparece cuando un niño es vacunado.

Lo que hacen las vacunas es crear un anticuerpo, pero tal y como lo demostró el estudio publicado en Journal of Virology, ¡los niños que no están vacunados en realidad producen más anticuerpos contra una gran variedad de cepas de la influenza en comparación con los niños vacunados!

Por lo general, las vacunas no imparten una inmunidad a largo plazo porque no crean el tipo de memoria que ocurre cuando pasa por el proceso de la respuesta inmunológica natural. La exposición natural no necesariamente provoca una infección – es posible obtener inmunidad natural sin enfermarse, siempre y cuando su sistema inmunológico esté funcionando bien.

De hecho, las vacunas NO fortalecen el funcionamiento saludable del sistema inmunológico, más bien lo debilitan.

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Investigaciones Previas Demuestran que la Vacuna Contra la Gripe Podría Duplicar Su Riesgo de Contraer Otro Tipo de Gripe

TODAS las vacunas son inmunosupresoras, lo que significa que afectan la función inmunológica durante un periodo de tiempo y a algunas personas pueden hacerlas susceptibles a contraer una infección viral o bacteriana…

Las sustancias químicas, adyuvantes, virus y bacterias alterados en el laboratorio, así como el ADN/ARN de sustratos de células de origen animal o humano contenidas en las vacunas podrían comprometer la función del sistema inmunológico y reducir la inmunidad – eso es a lo que se está arriesgando.

La creencia convencional es que es aceptable intercambiar esta leve supresión inmunológica por la inmunidad a una enfermedad infecciosa. Sin embargo, recuerde que esto significa que está intercambiando una supresión total del sistema inmunológico, que es su defensa principal contra TODAS las enfermedades conocidas – incluyendo millones de patógenos – por una inmunidad temporal en contra de una sola enfermedad.

Esto podría ayudar a explicar por qué las personas que se administran la vacuna contra la gripe en realidad podrían tener mayores posibilidades de contraer una infección de otro virus, como fue el caso con la H1N1 (gripe porcina).

En la primavera del 2009, justo cuando crecía la histeria por la gripe porcina, un estudio canadiense reveló que las personas que recibieron la vacuna contra la gripe estacional tenían el doble de probabilidad de contraer la gripe porcina.

Al principio esto se consideró como una hipótesis no probada, sin embargo, en el 2010 los resultados de varias investigaciones epidemiológicas revelaron que la vacuna contra la gripe estacional SÍ aumentó el riesgo de contraer gripe porcina.

Los cuatro estudios, realizados por agencias de salud pública en Canadá, involucraron a aproximadamente 2 700 personas en total y cada una tuvo el mismo resultado: si recibieron la vacuna contra la gripe estacional, tuvieron una mayor probabilidad de contraer la gripe porcina. Los investigadores escribieron lo siguiente en PLoS Medicine:3

“… Los resultados de los cuatro estudios (que incluyeron aproximadamente 1 200 casos de pH1N1 confirmados por el laboratorio y 1 500 controles) demostraron que los receptores previos de 2008-09 TIV [vacuna contra la gripe estacional] tuvieron un aumento de aproximadamente 1.4-2.5 veces de desarrollar la enfermedad pH1N1 que requirió de atención médica durante la primavera--verano del 2009 en comparación con las personas que no recibieron la TIV”.

Los investigadores se abstuvieron de decir que se había establecido una relación causal, en lugar de eso dijeron que podría haber factores no identificados en los grupos estudiados que contribuyeron con el aumento.

Sin embargo, es ciertamente plausible que la vacuna estacional modificó el sistema inmunológico de las personas de tal manera que los hizo menos capaces de combatir el H1N1, algo similar a lo que recientemente reportaron los investigadores en Journal of Virology.

¿La Vacuna Contra la Gripe Realmente Proporciona un Beneficio?

Probablemente piense que, dado a que los CDC afirman que la vacunación anual contra la gripe es la “mejor” forma de evitar contraer la gripe estacional, entonces se ha probado que es una medida efectiva.

Sin embargo, es difícil encontrar CUALQUIER tipo de evidencia científica válida que respalde la efectividad o seguridad de la vacuna contra la gripe – ¡y esto es particularmente cierto en grupos objetivo clave que según los CDC es muy importante que reciban la vacuna, tales como los adultos de edad avanzada, los niños y las mujeres embarazadas!

Por ejemplo, una revisión sistemática a gran escala de 51 estudios, publicada en la Base de Datos Revisiones Sistemáticas Cochrane4 de en el 2006, no encontró evidencia de que la vacuna contra la gripe sea más efectiva que un placebo en la prevención de la influenza en niños menores a dos años de edad. Los estudios involucraron a 260 000 niños de 6 a 23 meses de edad.

En el 2010, Cochrane también revisó la evidencia científica disponible acerca de la protección de las vacunas contra la influenza en personas de edad avanzada5 y los resultados fueron abismales. Los autores concluyeron que:

La evidencia disponible es de mala calidad y no proporciona evidencia alguna con respecto a la seguridad, eficacia y efectividad de las vacunas contra la influenza en personas de 65 años de edad en adelante”.

Luego está un estudio nuevo publicado en The Lancet Infectious Diseases,6 que revela que la vacuna contra la gripe previene la influenza tipo A o B en tan sólo 1.5 de cada 100 adultos vacunados.

Aunque los medios de comunicación están reportando esto como “una efectividad de 60%”, dependiendo de cómo utilice las estadísticas, el estudio confirmó que la vacuna contra la gripe solo proporciona “protección moderada” contra la gripe y, en algunas temporadas la protección es “menor o nula”.

El riesgo que toma por esta protección marginal o “nula” puede ser muy alto.

En el video de a continuación, Barbara Loe Fisher, co-fundadora y presidente del Centro Nacional de Información sobre Vacunas (NVIC), entrevistó a una artista de Connecticut y a su madre, un exprofesora de enfermería, que desarrolló GBS después de recibir la vacuna contra la gripe estacional en el 2008 y quedó permanentemente discapacitada con parálisis total del cuerpo.

Esta familia ha decidido compartir su desgarradora historia para ayudar a otras personas que han tenido la misma experiencia a no sentirse solas y a educar a otros sobre lo que significa sufrir los efectos secundarios de las vacunas. Lo que le sucedió a esta familia es un fuerte recordatorio de lo importante que es tomar decisiones bien informadas sobre las vacunas.

¿Realmente Quiere Evitar la Gripe Este Invierno?

A la larga, es la salud de su sistema inmunológico la que determina si se enferma o experimenta complicaciones después de exponerse a organismos virales o bacterianos relacionados con enfermedades infecciosas como la gripe.

La clave para reforzar el sistema inmunológico para convertirlo en una “máquina combatiente de enfermedades” está en sus hábitos de estilo de vida – comer saludablemente, combatir el estrés, hacer ejercicio, dormir bien, exponerse al sol de forma segura, entre otras cosas.

Manipular artificialmente su  sistema inmunológico a través de una vacuna para tratar de mantenerse sano no es una respuesta fisiológica normal a pesar de lo que le digan los medios de comunicación o su médico, además, a largo plazo esto podría suprimir su sistema inmunológico y dañar su salud.

Dado a que numerosos estudios demuestran que la vitamina D refuerza la inmunidad, la vitamina D3 particularmente, lo primero que debe hacer es asegurarse de que sus niveles de vitamina D se encuentren entre 50-70 ng/ml durante todo el año.

La única forma de asegurarse de esto es haciéndose un análisis. Para una explicación más detallada sobre todo lo que necesita saber antes de hacerse el análisis, por favor lea mis últimas actualizaciones en los Valores de Prueba y Tratamiento para la Deficiencia de Vitamina D. Mi conferencia gratuita de una hora de duración sobre la vitamina D también puede ayudarlo a optimizar sus niveles.

Aunque el uso de un suplemento es ACEPTABLE, la mejor forma de obtener la vitamina D es a través de la exposición segura a los rayos del sol, o bien utilizar una cama de bronceado segura (es decir, una con balastos electrónicos en lugar de balastos magnéticos, para evitar la exposición innecesaria a los campos EMF).

Otras medidas saludables que puede tomar incluyen comer sanamente, evitar el consumo de azúcares y endulzantes artificiales, hacer ejercicio, reducir el estrés y dormir lo suficiente.

Para más detalles sobre todo esto échele un vistazo a mi Plan de Nutrición gratuito aquí y puede leer todas mis recomendaciones para prevenir gripes y resfriados, aquí.