Los Pesticidas Se Encuentran en el 85 % de los Vegetales y Frutas

Pesticidas en Frutas

Historia en Breve

  • De acuerdo con el informe de residuos de pesticidas más recientemente publicado por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA), alrededor del 85 % de las más de 10 000 muestras que analizaron, contenían residuos de plaguicidas
  • El informe anual de residuos de pesticidas de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) de los Estados Unidos encontró que el 82 % de las frutas nacionales y el 62 % de los vegetales nacionales contenían residuos de plaguicidas
  • El pesticida neurotóxico clorpirifós fue el cuarto químico más frecuente en las muestras de alimentos de los Estados Unidos, entre los más de 200 pesticidas detectados
  • Aunque la mayoría de los residuos de pesticidas en los alimentos analizados cumplieron con los estándares federales, los científicos sugieren que esos estándares han quedado obsoletos y son demasiado laxos para proteger la salud pública

Por el Dr. Mercola

Consumir frutas y vegetales es esencial para mantenerse saludable y protegerse de las enfermedades crónicas, pero si compra las opciones convencionales, es probable que consuma algunos residuos de pesticidas en muchos de sus platillos.

Los efectos sobre la salud de estos residuos son objeto de debate, pero al considerar los muchos riesgos para la salud que están relacionados con los pesticidas--desde infertilidad y defectos de nacimiento hasta alteraciones endocrinas, trastornos neurológicos y cáncer,1--hay buenas razones para mantener su exposición lo más baja posible, incluyendo optar por alimentos orgánicos tanto como le sea posible.

De acuerdo con el informe sobre residuos de pesticidas más recientemente publicado por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés), que utilizó información del año 2015 y que fue publicado en noviembre del 2016, alrededor del 85 % de las más de 10 000 muestras que se analizaron contenían residuos de pesticidas.2

La Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) de los Estados Unidos también recopiló un informe anual sobre los residuos de pesticidas con datos del 2015, el cual fue publicado en noviembre del 2017.3 Éste, también demostró que la mayoría de las frutas y vegetales de los Estados Unidos están contaminadas con residuos de plaguicidas.

La Mayoría de los Alimentos de los Estados Unidos Contienen Residuos de Pesticidas

El muestreo de la FDA de casi 6 000 alimentos reveló que las frutas y vegetales son los que están más frecuentemente contaminados con residuos de pesticidas. Cabe destacar que el 82 % de las frutas nacionales y el 62 % de los vegetales nacionales contenían tales residuos, incluyendo:4

  • 97 % de las manzanas
  • 83 % de las uvas
  • 60 % de los tomates
  • 57 % de los hongos
  • 53 % de las ciruelas

Entre las frutas y vegetales importados, el 57 % y 47 % contenían residuos respectivamente, además, las variedades importadas tenían más probabilidades de contener niveles ilegales de residuos de pesticidas en comparación con las muestras nacionales.

El hecho de que el pesticida neurotóxico clorpirifós sea el cuarto químico más frecuente en las muestras entre los más de 200 pesticidas detectados es una señal de alarma.5

Este químico, conocido por alterar el desarrollo del cerebro y provocar daño cerebral, anomalías neurológicas, menor cociente intelectual y agresividad en los niños, tiene una vida media de varias semanas entre los alimentos, por lo que los productos que no son orgánicos son una importante fuente de exposición.

La FDA se apresuró a señalar que "más del 98 % de los alimentos nacionales y el 90 % de los importados cumplían con los estándares federales", sin embargo, eso no es mucho decir cuando los estándares federales son demasiado laxos para proteger la salud pública.

La ex-científica principal de la EPA y directora del Programa de Salud Reproductiva y Medio Ambiente de la Facultad de Medicina de la Universidad de California en San Francisco, Tracey Woodruff, dijo para Environmental Health News:

"Las prácticas de evaluación de riesgos en las agencias federales no se han actualizado para aplicar principios científicos modernos, incluido el hecho de que las personas están expuestas a múltiples sustancias químicas y que ciertos grupos, como los genéticamente susceptibles, los más jóvenes y las personas de edad avanzada pueden estar en mayor riesgo de exposición".6

Publicidad
Sabe a azúcar, aumenta la longevidad y mejora el estado de ánimoSabe a azúcar, aumenta la longevidad y mejora el estado de ánimo

¿Cuánto Glifosato Contienen Sus Alimentos?

Uno de los pesticidas que destaca por su ausencia en el último informe de la FDA es el glifosato, el herbicida más ampliamente utilizado en todo el mundo.

La agencia declaró que durante el año fiscal del 2017 completaron las pruebas preliminares de residuos de glifosato en soya, maíz, leche y huevo, y que había planes de "ampliar las pruebas a otros alimentos en el año fiscal (FY, por sus siglas en inglés) del 2018", sin embargo, en cuanto a los resultados hasta ahora, solo han declarado:

"Los resultados preliminares de las pruebas de glifosato no demostraron violaciones del límite de residuos de pesticidas en los cuatro productos evaluados (soya, maíz, leche y huevo)".7

Una vez más, este es un punto bastante arbitrario, ya que en julio del 2013, justo en medio de los crecientes cuestionamientos acerca de la seguridad del glifosato, la EPA siguió adelante y elevó los límites permitidos de glifosato tanto en los alimentos como en los cultivos de alimentos.8 Y según informa Environmental Health News:9

"Ni la FDA ni el USDA han analizado el glifosato de manera rutinaria a pesar de ser el herbicida más utilizado en el mundo, y las pruebas realizadas por académicos, grupos de consumidores y otros países, han demostrado residuos del herbicida en los alimentos.

A principios del 2016 la FDA dijo que planeaba comenzar a realizar pruebas para el herbicida, y los documentos indican que un químico de la FDA informó haber encontrado residuos en la miel y los productos de avena, sin embargo, los resultados generales de las pruebas del programa no se han divulgado públicamente.

Los detalles del programa de análisis se mantienen en secreto, y en los documentos publicados por la FDA a través de la FOIA, se tachan grandes bloques de información. La FDA se negó a hacer comentarios sobre el estado de las pruebas del glifosato y 2,4-D, cuándo incluso podría publicar algunos resultados".

El glifosato se usa en grandes cantidades en los cultivos transgénicos tolerantes al glifosato (es decir, variedades de Roundup Ready), y su uso aumentó casi quince veces desde 1996.10

El glifosato es también una herramienta popular para desecar (o acelerar la desecación) de cultivos como el trigo y la avena, y los investigadores de la Facultad de Medicina de la Universidad de California en San Diego (UCSD) señalan en el JAMA que el Roundup "se le aplica como un desecante a la mayoría granos que no son transgénicos".

Entonces, tanto en los cultivos de granos transgénicos como en los que no lo son, "hay glifosato en el momento de la cosecha".

El Glifosato Está Relacionado con Alteraciones Intestinales y Problemas Respiratorios

Las preocupaciones sobre la toxicidad del glifosato han aumentado desde que la Agencia Internacional para la Investigación Sobre el Cáncer (IARC, por sus siglas en inglés) del año 2015 determinó que el glifosato es un "posible carcinógeno".

Pero ese no es el único problema. El glifosato es tóxico para muchos microbios y para la mayoría de las plantas, y un posible efecto de la exposición crónica en dosis bajas al glifosato es la alteración del equilibrio entre los microbios intestinales en dirección a una presencia excesiva de patógenos.

Un estudio del 2018 que fue publicado en Toxicology Reports reveló que la exposición al Roundup a largo plazo provocó alteraciones en los microbios intestinales de las ratas, lo cual perturbó específicamente la proporción de los firmicutes y bacteroidetes en las ratas hembras, de manera que los firmicutes disminuyeron y los bacteroidetes aumentaron.11

Esto podría tener implicaciones en cómo el glifosato contribuye a las enfermedades, ya que investigaciones independientes han encontrado que, por ejemplo, las personas con diabetes tienden a tener menos firmicutes y cantidades más abundantes de bacteroidetes en comparación con las personas que no tienen diabetes.12

También se ha encontrado una correlación positiva entre las proporciones de bacteroidetes y firmicutes, y una menor tolerancia a la glucosa. Además, otras investigaciones han relacionado la exposición a los pesticidas en el trabajo, con un mayor riesgo de padecer problemas respiratorios, bronquitis crónica y "síntomas que se relacionan con la obstrucción del flujo de aire".

De hecho, las personas expuestas a pesticidas en el trabajo tuvieron un riesgo 22 % mayor de desarrollar enfermedad pulmonar.13

Se estima que hasta 20 000 trabajadores agrícolas son envenenados por pesticidas cada año, aunque es probable que el número real sea mucho mayor debido a que es probable que muchos de los trabajadores no busquen atención médica, o sí lo hacen sean diagnosticados de manea equivocada.14

Mientras que la FDA se demora demasiado en obtener la información pertinente para el público sobre los niveles de glifosato en los alimentos, la Agencia Canadiense de Inspección de Alimentos ha revelado que alrededor del 30 % de los más de 3 000 alimentos que analizaron contenían glifosato.15

Esto incluyó a cerca del 37 % de los productos de granos, 47 % de los productos de frijoles/chicharos/lentejas y más del 30 % de los cereales y alimentos para bebés. Incluso el 7 % de las frutas y vegetales frescos contenía residuos.

Mientras tanto, en los Estados Unidos, los investigadores analizaron los niveles de glifosato en la orina y su metabolito el ácido aminometilfosfónico (AMPA) en 100 personas que viven en el sur de California durante un período de 23 años--de 1993 al 2016.16 Al comienzo del estudio, muy pocos de los participantes tenían niveles detectables de glifosato en la orina, pero para el año 2016, el 70 % los tenía.

La prevalencia de la exposición de los seres humanos al glifosato aumentó en un 500 % durante el período de estudio, mientras que los niveles reales del químico, en ug/ml, aumentaron en un sorprendente 1 208 %. Si desea conocer sus niveles personales de glifosato, ahora puede descubrirlo.

El Instituto de Investigaciones Sobre la Salud (HRI, por sus siglas en inglés) de Iowa, desarrolló el Kit para Analizar la Presencia Ambiental de Glifosato en la Orina, que le permitirá determinar su propia exposición a este herbicida tóxico, mientras que a su vez participa en un estudio mundial sobre las exposiciones ambientales al glifosato.

Optar por lo Orgánico Puede Reducir su Exposición a los Pesticidas

Consumir alimentos transgénicos no orgánicos (los principales candidatos para la pulverización de Roundup) se asocia con mayores niveles de glifosato en el cuerpo.17

Un estudio que incluyó a cerca de 4 500 personas en los Estados Unidos, también encontró que quienes "a menudo o siempre" consumían productos orgánicos tuvieron niveles 65 % menores de residuos de pesticidas, en comparación con aquellos que consumieron una menor cantidad de productos orgánicos.18

Por lo tanto, elegir alimentos orgánicos con la mayor frecuencia posible es una forma importante de reducir su exposición a los pesticidas y, en efecto, evitar los pesticidas es la principal razón por la cual las personas optan por lo orgánico.19

Estos químicos no solo representan un riesgo directo para la salud humana, incluso para los bebés en desarrollo,20 sino que también amenazan a la Tierra, tal como ya lo sabemos. Incluso se han detectado residuos de glifosato de 653 partes por billón (ppb) en algunas muestras de miel--una cantidad que es más de 10 veces el límite europeo de 50 ppb.21

Las abejas, como polinizadores, viajan de una planta a otra. Con los sembradíos cada vez más convertidos en campos transgénicos de maíz y soya donde el glifosato y otros plaguicidas se utilizan ampliamente, es fácil que se contaminen y luego transfieran esos contaminantes a la miel que producen.

De manera similar, una investigación publicada en la revista Nature Communications ha revelado que el polen recolectado junto a los campos de maíz está contaminado con hasta 32 pesticidas distintos.22

Hasta el momento se desconocen los efectos de tales exposiciones químicas sobre las abejas y otros polinizadores, pero por sentido común sabemos que no pueden ser buenos. Así que recuerde que con cada producto de consumo que sea orgánico y de animales alimentados con pastura que compre, en realidad está "votando" por el uso de menos pesticidas y herbicidas.

Además, no tiene que ser "todo o nada"--optar por lo orgánico 100 % es lo ideal, sin embargo, cada compra orgánica que haga, ayuda.

Si tiene que elegir entre qué productos comprar orgánicos, le recomiendo priorizar los alimentos orgánicos de origen animal y luego utilizar la lista de alimentos "Dirty Dozen" del Grupo de Trabajo Ambiental (EWG, por sus siglas en inglés), los cuales están entre los más contaminados con pesticidas y por lo tanto son los alimentos de origen vegetal que es más importante comprar orgánicos. A partir del 2017 incluyen:23

Fresas

Espinacas

Nectarinas

Manzanas

Duraznos

Peras

Cerezas

Uvas

Apio

Jitomates

Pimientos dulces

Papas

Para los alimentos no orgánicos que consuma, lavarlos con una solución de bicarbonato de sodio podría ayudar a eliminar algunos de los pesticidas que se encuentran la superficie de las frutas o vegetales,24 aunque eso no eliminará los residuos químicos que hayan penetrado más allá de la cáscara.

Quitarles la cáscara es otra opción para reducir los residuos de pesticidas, pero eso también significaría quitarle los compuestos saludables que contiene su cáscara (y aún así puede haber residuos que hayan penetrado la carne del alimento).

Por estas razones, la mejor manera de evitar los residuos de pesticidas en sus alimentos es elegir aquellos que no hayan estado expuestos a los pesticidas desde un principio, es decir, que sean orgánicos.