Su desayuno podría contener una dosis de pesticidas

Cheerios

Historia en Breve

  • 43 de los 45 productos hechos con avena cultivada convencionalmente dieron positivo en una prueba de glifosato, el ingrediente activo en el herbicida Roundup de Monsanto
  • 31 tenían niveles más altos de glifosato de lo que, según los científicos del EWG, podría proteger la salud de los niños
  • Algunos de los alimentos con niveles detectables de glifosato son la avena instantánea Dinosaur Eggs y avena cortada de Quaker, así como cereales de Cheerios, barras de granola de Nature Valley y Classic Granola de Back to Nature
  • De los 16 productos de avena orgánica que se analizaron, 5 contenían glifosato
  • Elegir productos orgánicos que no contengan ingredientes transgénicos (GMO, por sus siglas en inglés) es una buena forma de reducir su exposición al glifosato, sin embargo, no es infalible pues el producto químico también se utiliza como desecante en muchos cultivos que no son transgénicos

Por el Dr. Mercola

En agosto de 2018, los miembros del jurado dictaminaron que Monsanto (que fue adquirido por Bayer en junio de 2018) debía pagar USD$ 289 millones en daños a DeWayne "Lee" Johnson, un exempleado de mantenimiento de una escuela, quien aseguraba que el herbicida Roundup causó su cáncer terminal.

El jurado estuvo de acuerdo y le concedió a Johnson, no solo justicia monetaria, sino que también contribuyeron con aseveraciones de que, desde hace décadas, Monsanto era consciente que Roundup era peligroso – y actuó con "malicia o coacción" para encubrir sus riesgos.1

Miles de personas en todo Estados Unidos han presentado demandas legales alegando que tanto el herbicida Roundup de Monsanto como otros similares, que contienen el ingrediente activo glifosato, les causaron cáncer.

Este mismo químico es el pesticida que más se utiliza en el país y ahora aparece en el suministro de alimentos en niveles potencialmente inseguros – así como en alimentos comunes que muchas personas en los Estados Unidos consumen a diario para desayunar y preparar bocadillos, como cereales y barras de granola.

El herbicida fue detectado en casi todas las muestras de alimentos analizadas

El Grupo de Trabajo Ambiental (EWG, por sus siglas en inglés) solicitó pruebas de laboratorio independientes con el fin de determinar la cantidad de glifosato presente en el suministro de alimentos de los Estados Unidos.

Aunque la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, por sus siglas en inglés) de los Estados Unidos ha sometido diversos alimentos a pruebas de detección de glifosato, y estas revelaran "una cantidad considerable" de residuos, sus hallazgos aún no se han hecho públicos.2

Sin embargo, las pruebas del EWG revelaron que 43 de 45 los productos elaborados con avena cultivada convencionalmente dieron positivo en la prueba de detección de glifosato, 31 de los cuales tenían niveles superiores de lo que, según los científicos del EWG, podría proteger la salud de los niños.

Algunos de los alimentos con niveles detectables de glifosato son la avena instantánea Dinosaur Eggs y la avena cortada de Quaker, así como un cereal de Cheerios, barras de granola de Nature Valley y Classic Granola de Back to Nature.

Además, de los 16 productos de avena orgánica que fueron analizados, 5 contenían glifosato, aunque a niveles inferiores a la referencia de salud emitida por el EWG de 160 partes por mil millones (ppb).

En 2016, las pruebas realizadas por las organizaciones sin fines de lucro Food Democracy Now! y The Detox Project también detectaron residuos de glifosato en diversos alimentos como Doritos, Oreos y Stacy's Pita Chips.3

De hecho, el glifosato se ha detectado en la bebida nutricional PediaSure Enteral Formula, que se administra a bebés y niños a través de sondas. El 30 % de las muestras analizadas contenían niveles de glifosato por encima de 75 ppb – niveles que superan considerablemente aquellos que destruyen las bacterias intestinales en los pollos (0.1 ppb).4

¿Cuál es el nivel de exposición al glifosato que representa un peligro?

Esta es una pregunta que hasta el momento no tiene una respuesta concreta, sin embargo, la exposición al químico, incluso en niveles bajos, se ha relacionado con diversos riesgos para la salud.

Por ejemplo, la exposición diaria a niveles ultra bajos durante 2 años provocó la enfermedad del hígado graso no alcohólico (EHGNA) en ratas,5 mientras que, en 2015, la Agencia Internacional para la Investigación sobre el Cáncer (IARC, por sus siglas en inglés) determinó que el glifosato es un "posible carcinógeno".

A partir de julio de 2017, la Oficina de Evaluación de Riesgos para la Salud Ambiental (OEHHA, por sus siglas en inglés) de la Agencia de Protección Ambiental de California también mencionó que el glifosato es un químico conocido por causar cáncer según la Propuesta 65, donde se exige que los productos de consumo con posibles ingredientes carcinógenos lleven etiquetas de advertencia.

Según el grupo ambientalista EWG, "la OEHHA ha propuesto un denominado nivel de riesgo no significativo para el glifosato, de 1.1 miligramos por día para un adulto promedio que pese cerca de 154 libras (70 kg). Dicho nivel de exposición es más de 60 veces menor que el nivel de seguridad establecido por la Agencia de Protección Ambiental".6

La exposición al glifosato al nivel de riesgo emitido por la OEHHA presentaría un aumento en el riesgo de cáncer de por vida en una proporción de 1 en 100 000 para un adulto, pero el EWG señala que posiblemente sea necesario imponer un margen adicional de seguridad 10 veces mayor con el fin de proteger a los más vulnerables, como niños y fetos.

Bajo esta metodología, prácticamente todos los alimentos analizados por el EWG podrían ser perjudiciales para la salud humana:7

"Con este factor de seguridad adicional para la salud infantil, el EWG calculó que podría presentarse un riesgo de cáncer en una proporción de uno en un millón por el consumo de 0.01 miligramos de glifosato por día.

Para alcanzar esta dosis máxima, una persona solo tendría que consumir una porción de 60 gramos de alimentos con un nivel de glifosato de 160 partes por mil millones o ppb.

La mayoría de las muestras de productos convencionales de avena del estudio realizado por el EWG excedieron las 160ppb, lo que significa que una sola porción de esos productos excedería la referencia de salud emitida por el EWG...

La EPA ha calculado que, probablemente, los niños de 1 a 2 años tengan la mayor exposición [al glifosato], a un nivel 2 veces mayor en comparación con el nivel de riesgo no significativo de California y 230 veces el índice de referencia de salud de EWG".

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El glifosato se suele usar como desecante en productos que no son transgénicos

La mayor parte de las más de 250 millones de libras (113 398 toneladas) de glifosato que se rocían año con año en los cultivos, se utiliza en cultivos transgénicos,8 como el maíz y la soya que están diseñados para resistir los efectos letales del químico Roundup.

Y aunque elegir productos orgánicos sin transgénicos es una buena forma de reducir su exposición al glifosato, no es infalible, ya que el producto químico también se utiliza como desecante en muchos cultivos que no son transgénicos.

En las regiones más frías del norte, los agricultores de trigo y cebada deben esperar a que sus cultivos se sequen antes de la cosecha. En lugar de esperar casi 2 semanas para que esto ocurra de manera natural, los agricultores se dieron cuenta que podían rociar las plantas con glifosato, matar el cultivo y acelerar su secado (un proceso conocido como desecación).

Desecar el trigo con glifosato es particularmente común en épocas con clima húmedo y la práctica ha ido aumentando en los estados de Dakota del Norte y al norte del medio oeste en los Estados Unidos, así como en áreas de Canadá y Escocia (donde se originó el proceso).

En algunos casos, los alimentos que no son transgénicos pueden estar aún más contaminados con glifosato que los cultivos transgénicos, ya que se rocían unas semanas antes de convertirse en cereales, pan, galletas y productos similares.

Algunos investigadores de la Escuela de Medicina de la Universidad de California en San Diego (UCSD) señalaron en JAMA que se "aplica Roundup como desecante a la mayoría de los granos pequeños que no han sido modificados genéticamente". Por lo tanto, “el glifosato se encuentra en estos cultivos durante la cosecha", sin importar si son transgénicos o no.9

En un comunicado, un portavoz de Quaker negó el uso de glifosato durante el proceso de molienda, sin embargo, reconoció que el producto químico se suele utilizar antes de la cosecha:10

 “Los agricultores en todo el sector suelen utilizar glifosato para aplicarlo antes de la cosecha. Una vez que nos transportan la avena, la sometemos a un riguroso proceso que la depura a fondo (la pela, limpia, tuesta y forma en hojuelas).

Todos los niveles de glifosato que puedan quedar remanentes están significativamente por debajo de los límites y cumplen las normas de inocuidad establecidas por la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés) y la Comisión Europea como un producto inocuo para el consumo humano".

Sin embargo, las pruebas del EWG revelaron que una muestra de avena Quaker contenía 1 300 ppb de glifosato y otra con 1 100 ppb. Junto con el trigo y la avena, otros cultivos que comúnmente se desecan con glifosato son:

Lentejas

Chícharos

Soya convencional

Maíz

Linaza

Centeno y alforfón

Triticale

Canola

Mijo

Betabel azucarero

Papas

Girasoles

Productos transgénicos que se promocionan como no transgénicos

La tecnología de repeticiones palindrómicas cortas agrupadas y regularmente interespaciadas (CRISPR, por sus siglas en inglés) y otras herramientas de modificación genómica ya se están utilizando en la industria alimentaria con el fin de crear cultivos transgénicos en los que el ADN se ajuste o se corte en un lugar preciso.

TALEN, otra herramienta de modificación genómica que se utiliza para buscar y editar secuencias de ADN, también se usa para desactivar genes que crean grasas trans en el aceite de soya. De igual forma se pueden insertar nuevas secuencias de ADN para modificar el gen.

Aunque están modificados genéticamente, los alimentos sometidos a una edición genómica no se promocionan ni se etiquetan como tal. De hecho, la compañía de biotecnología Calyxt, que creó el aceite de soya transgénico, está comercializando su producto como "no transgénico" y para fines de 2018 espera ser añadido a las papas, aderezos para ensaladas y otros alimentos.11

Puesto que no contienen material genético extraño, los alimentos producidos mediante herramientas para la edición de genomas no están sujetos a la regulación del Departamento de Agricultura de los Estados Unidos (USDA, por sus siglas en inglés) – aunque una comisión asesora recomendó que los alimentos modificados no se etiqueten como orgánicos – ni a la de otros organismos reguladores.

"Estos productos, al menos por ahora, quedan fuera del alcance de las regulaciones actuales", informó el Times.12 Hasta la fecha, la tecnología se ha utilizado no solo para producir soya con perfiles de ácidos grasos alterados, sino también para que las papas tarden más en oxidarse, permanezcan más frescas por más tiempo y no produzcan carcinógenos cuando se frían.

Otros usos para la edición de genomas en los alimentos son la creación de trigo bajo en gluten, hongos que no se oxidan y jitomates que se pueden producir en áreas con temporadas de cultivo más cortas.

De hecho, la tecnología puede usarse para crear plantas que soporten sequías y enfermedades, o semillas que se puedan modificar para generar condiciones de crecimiento inimitables.

Según los informes, la FDA evalúa si los alimentos sometidos a una edición de genomas conllevan riesgos de inocuidad y se han suscitado inquietudes de que las ediciones fuera de la diana genética, también conocidas como off-target, podrían provocar cambios involuntarios en el ADN de la planta, con consecuencias que podrían incluir trastornos del crecimiento, exposición a enfermedades vegetales o la introducción de alérgenos o toxinas.13

En una entrevista con GM Watch, Michael Antoniou, un genetista molecular con sede en Londres, explicó que podrían ocurrir cambios significativos debido a la edición de genomas, tanto en contextos agrícolas como médicos, lo que requiere estudios de toxicidad y seguridad a largo plazo. El experto explicó:14

"Muchas de las mutaciones fuera de la diana genética que fueron inducidas por la edición del genoma, así como aquellas inducidas por el cultivo de tejidos, sin duda serán benignas en cuanto a los efectos sobre la función del gen. Sin embargo, muchas no serán benignas y sus efectos pueden llegar hasta el producto final comercializado, ya sea de origen vegetal o animal...

Por ello, no solo es necesario llevar a cabo la secuenciación del genoma completo para identificar todas las mutaciones fuera de la diana genética que se originan de la edición genómica con la tecnología CRISPR, sino también es esencial determinar los efectos de estos cambios involuntarios en los patrones globales de la función génica.

...Además, cabe señalar que la modificación intencionada y guiada a un gen dado también puede tener efectos inintencionados. Por ejemplo, la alteración o modificación total de una función enzimática puede generar reacciones bioquímicas secundarias e inesperadas o impredecibles que pueden alterar considerablemente la composición de un organismo, como un cultivo alimentario".

¿Cuánto glifosato hay en su cuerpo – y en su agua potable?

Los investigadores de la Escuela de Medicina de la UCSD analizaron por 23 años – de 1993 a 2016 – los niveles de glifosato y sus aminometilfosfónico metabolito (AMPA) en la orina de 100 personas que vivían al sur de California.15

Al inicio del estudio, Paul Mills, profesor de medicina familiar y salud pública en la Universidad de California en San Diego, declaró que muy pocos de los participantes tenían niveles detectables de glifosato en su orina, pero en 2016, el 70 % de ellos sí los presentaron.16

En general, la prevalencia de la exposición humana al glifosato se incrementó en un 500 % durante el período del estudio, mientras que los niveles reales de la industria química, en ug/ml, se incrementó en un asombroso 1 208 %.17

Si desea conocer sus niveles de glifosato, ahora puede descubrirlo, mientras participa en un estudio mundial sobre exposición ambiental al glifosato. El Instituto de Investigaciones sobre la Salud (HRI) en Iowa desarrolló el kit para analizar la presencia ambiental de glifosato en la orina, que le permitirá determinar su propia exposición a este herbicida tóxico.

Al solicitar este kit en automático puede participar en el estudio y ayudar al HRI a comprender mejor el alcance de la exposición y contaminación por glifosato.

En unas pocas semanas, recibirá sus resultados, junto con información sobre cómo se comparan sus resultados con los demás y qué hacer para ayudar a reducir su exposición. Le proporcionamos estos kits sin ninguna ganancia para que pueda participar en este estudio ambiental.

Mientras tanto, consumir en la medida de lo posible el mayor número de productos orgánicos e invertir en un buen sistema de filtración de agua para su hogar son 2 de las mejores maneras de reducir su exposición al glifosato y otros pesticidas. En el caso del glifosato, también es aconsejable evitar los cultivos desecados como el trigo y la avena.

Si desea saber la cantidad de glifosato en su agua potable, el HRI también ha desarrollado un kit para analizar la presencia de glifosato en el agua que le permitirá determinar los niveles de glifosato en su suministro.

Si le preocupan los residuos de glifosato en sus alimentos, puede ayudar a impulsar el cambio comunicándose con las compañías que elaboran sus productos. Dígales que prefiere alimentos sin residuos de glifosato – y que, en caso de ser necesario, está dispuesto a adquirir otra marca para encontrarlos.

Olga Naidenko, asesora científica del EWG para la salud infantil, declaró lo siguiente para CNN:

"Sabemos que es posible cultivar avena y otros cereales sin herbicidas. Las empresas no tienen porque esperar a la EPA para actuar, simplemente pueden hablar con sus proveedores y decir: 'por favor, cultiven nuestra avena sin glifosato, porque nuestros clientes han empezado a quejarse".

El toxicólogo de EWG, Alexis Temkin, agregó que "este uso particular del glifosato representa un porcentaje muy pequeño de su uso general, sin embargo, puede tener la mayor repercusión en la salud humana, por lo que creemos que este es el sitio indicado para reducir el uso de glifosato".18

Además de expresar su opinión a las empresas de alimentos, comuníquese con la EPA y exhórtelos a restringir las aplicaciones de glifosato antes de la cosecha con el fin de reducir la cantidad de este químico tóxico que ingresa al suministro de alimentos.

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