Por el Dr. Mercola
Su tracto gastrointestinal actualmente es considerado como uno de los ecosistemas microbianos más complejos en la Tierra. Probablemente usted tenga un conocimiento básico sobre el hecho de que los microbios en su intestino afectan su digestión. Pero su influencia se extiende mucho más allá, llega hasta su cerebro, corazón, piel, estado de ánimo, peso… y la lista sigue y sigue.
Cerca de 100 trillones de bacterias, hongos, virus y otros microorganismos componen la microflora de su cuerpo y la ciencia avanzada ha dejado bastante claro que estos organismos desempeñan un papel muy importante en su salud, tanto física como mental.
En este momento, ya la mayoría de las personas saben que nuestras bacterias superan en número a nuestras células, 10-1, pero esto se vuelve aún más complejo, ya que además de bacterias también existen virus. Los más comunes son los bacteriófagos y hay algo que también debe entender, los virus superan el número de bacterias 10-1.1 Eso significa que usted tiene cerca de un cuatrillón de estos virus en su intestino.
Toda esta microflora intestinal es parte de su sistema inmunológico y carca del 80 por ciento de ello se origina en su intestino. Los investigadores han descubierto que los microbios de todo tipo desempeñan un papel instrumental en el funcionamiento de su cuerpo. Por ejemplo, las bacterias benéficas, también conocidas como probióticos, han demostrado:
Por todas estas razones y más, le recomiendo una alimentación rica en alimentos enteros y sin procesar junto con alimentos cultivados o fermentados. Si, por cualquier razón usted no consume alimentos fermentados al menos unas cuantas veces a la semana, sería bueno considerar utilizar un suplemento.
Un suplemento de probióticos de alta calidad puede ser un aliado útil para restaurar el equilibrio saludable de su microbiota- especialmente cuando toma antibióticos y/o consume alimentos procesados, ya que estos dos tienden a dañar las colonias de bacterias benéficas en su intestino.
La Secuenciación de ADN Refuerza la Base de Conocimiento Sobre el Papel de las Bacterias Intestinales en la Salud
Un artículo reciente publicado en Medical News Today2 habla sobre uno de los avances más recientes en el campo de la salud gastrointestinal, señalando que actualmente se está utilizando la secuenciación avanzada de ADN para arrojar a la luz las complejas interacciones de las bacterias intestinales y cómo esas interacciones afectan la salud y desarrollo de enfermedades.
El artículo cita al profesor Gary Wu de la Universidad de Pennsylvania, Filadelfia diciendo:
“Utilizar novedosos enfoques de metagenómica, los científicos al fin están comenzando a caracterizar las relaciones de abundancia y comunidad taxonómica no sólo de las bacterias, sino también de otros microbios que habitan en el entorno intestinal.
Este apasionante trabajo está llevándonos un paso más cerca a entender la importancia de la diversidad microbiana en la salud intestinal y enfermedades, esto finalmente podría llevarnos a descubrir nuevas formas de diagnosticar y tratar las enfermedades gastrointestinales (GI).”
De acuerdo con el artículo presentado, su flora intestinal puede dividirse en las siguientes cuatro categorías:
- Procariotas (bacterias y arqueas)
- Bacteriófagos (virus que infectan procariotas)
- Virus eucariotas (agentes infecciosos que se reproducen dentro de las células vivientes)
- Meiofauna (principalmente hongos y protozoos)
De acuerdo con el profesor Wu, los hongos y bacterias tienden a competir los unos con los otros. Cuando reduce la diversidad de hongos en su intestino, aumenta la colonización de bacterias saludables y viceversa. Un ejemplo de esto es cuando desarrolla una infección por Candida después de una ronda de antibióticos. Cuando los antibióticos matan las bacterias saludables, da lugar a una proliferación de hongos.
A través de las técnicas modernas de secuenciación de ADN, los investigadores también se han dado cuenta de que los meiofauna en su intestino pueden ser o útiles o dañinos, dependiendo del tipo de hongo o protozoos en cuestión. Los helmintos y blastocytis, dos tipos de parásitos, parecen realizar funciones protectoras suprimiendo la inflamación en su intestino, mientras que otros contribuyen con las enfermedades gastrointestinales.
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Incluso los Microorganismos “Malos” Desarrollan un Papel en el Mantenimiento de la Salud
Actualmente las investigaciones nos están mostrando que las complejas interacciones de todos estos microorganismos, tanto bacterianas como no bacterianas, pueden literalmente mejorar o dañar su salud.
Los investigadores están comenzando a reconocer que la microbiota intestinal es uno de sus “órganos” menospreciados.3 Incluso han sugerido que sería más apto ver su cuerpo como un “súper organismo” compuesto por microorganismos simbióticos.
La naturaleza benéfica de esta relación simbiótica se extiende más allá de las llamadas bacterias “amigables.” Incluso los microorganismos que generalmente consideraría “malos” o patogénicos pueden desempeñar un papel integral en el mantenimiento de la salud y prevención de enfermedades. Como lo señaló el artículo presentado:4
“Los virus más comunes en el intestino son los bacteriófagos. Estos virus de rápida evolución pueden superar en número a sus bacterias por un factor de 10 a uno; infectan y destruyen las células bacterianas y tienen la capacidad de transferir material genético de una bacteria a otra, con profundas implicaciones para la salud GI y enfermedades.
Existe una relación depredador-presa entre los bacteriófagos y las bacterias que podría desempeñar un papel muy importante en la alteración de la microbiota bacteriana en condiciones como la enfermedad inflamatoria intestinal (IBD),” dice el profesor Wu. “El hecho de que los bacteriófagos inducen respuestas inmunológicas en las bacterias y también podrían transmitir material genómico en las bacterias que podría alterar su función hace a estos virus extremadamente importantes y necesitamos saber mucho más acerca de ellos.”
Los Microbios Intestinales y el Cáncer
Otro artículo que destaca la importancia de la diversidad y equilibrio microbiano fue publicado recientemente por el Instituto de Ciencia para la Sociedad,5 en el que la Dra. Eva Sirinathsinghji habla de cómo influye su microbiota en su susceptibilidad al cáncer. Ella también señala la influencia de su flora intestinal en órganos como su piel, pulmones, mamas e hígado.
Los microorganismos intestinales incluso parecen impactar en la eficacia de varios tratamientos contra el cáncer. Por ejemplo, ella cita un estudio de Science en el que los ratones que recibieron antibióticos tres semanas antes de la inoculación del tumor no respondieron bien a la inmunoterapia tumoral dada. Los ratones modificados para no tener microbios intestinales también respondieron de peor manera al tratamiento.
Aún más importante, las terapias contra el cáncer que no funcionan activando la respuesta inmunológica del cuerpo tampoco funcionarán a menos que tenga los microbios intestinales apropiados. Tales terapias, que incluyen ciertos agentes de quimioterapia, en realidad dependen de los microbios intestinales para erradicar el tumor… La microbiota intestinal es conocida por afectar la inflamación y el metabolismos, ambos son sellos distintivos del cáncer. Pero las técnicas de secuenciación de ADN han hecho mucho más para mejorar nuestro entendimiento sobre esto.
“Con la llegada de la metabolómica y las técnicas avanzadas de secuenciación, los investigadores están comenzando a descifrar el papel de microbios específicos así como perfiles microbióticos globales específicos relacionados con diferentes tipos de cáncer. Estos descubrimientos están dando lugar a nuevas vías de investigación en la prevención y tratamiento del cáncer,” dice ella. “La relación entre la microbiota intestinal y el cáncer parece ser compleja, involucrando especies microbianas específicas, así como una desregulación de la microbiota global, llamada disbiosis.”
Los investigadores ya han relacionado ciertos microbios con algunos tipos de cáncer específicos, como:
- H.pylori en el cáncer gástrico. (La Agencia Internacional para la Investigación del Cáncer define este microbio como un carcinógeno6) Curiosamente, el H.pylori también ha sido relacionado con un menor riesgo de adenocarcinoma esofágico, demostrando la complejidad involucrada y los efectos específicos en los órganos que pueden tener los microbios cuando se trata de su impacto sobre el cáncer.
- Virus de hepatitis C (HCV) en carcinoma hepatocelular
- Infección por Salmonella entérica crónica en el cáncer de vesícula bilia
- Haemophilus influenza y Candida albicans en los tumores del tracto respiratorio inferior
¿Cómo Pueden los Microbios Promover o Proteger Contra el Cáncer?
Así que, ¿cómo será que los microbios que viven en su intestino afectan todos estos otros órganos? De acuerdo con la Dra. Sirinathsinghji, un gran número de mecanismos diferentes pueden entrar en juego. Por ejemplo, los microbios pueden afectar la susceptibilidad del cáncer por medio de la modulación de su sistema inmunológico e inflamación. También pueden influir en la expresión genética y parecen tener la capacidad de alterar la estabilidad de sus genes. Ella también señala que:
“También se cree que es importante un fallo en la barrera intestinal para limitar las interacciones entre microbiota-huesped. La separación anatómica entre el huésped y los microbios es una primera línea de defensa crucial y se mantiene a través de un revestimiento epitelial intacto y capa mucosal, así como un sistema que detecta y elimina las bacterias. Consistentemente, la colitis ulcerosa, una enfermedad que altera la barrera, aumenta el riesgo de cáncer de colon. Los estudios que han inducido un fallo en la barrera en animales de laboratorio también han demostrado que los carcinógenos tienen mayores probabilidades de pasar a través de un revestimiento intestinal dañado, dando lugar a una mayor formación tumoral en los órganos locales y distantes.”
Curiosamente, la Dra. Sirinathsinghji sugiere que valdría la pena explorar la terapia de trasplante de microbiota fecal para el tratamiento de ciertos tipos de cáncer. Este novedoso procedimiento ha sido utilizado exitosamente en casos de infecciones potencialmente mortales como Clostridium difficile, pero la evidencia sugiere que también podría tener muchas otras aplicaciones. El cáncer es una. La obesidad es otra.
Relación Entre los Microbios y la Obesidad
Una investigación7 preliminar presentada en el 2010 reveló que el trasplante de materia fecal de personas delgadas y sanas en personas obesas con síndrome metabólico dio lugar a una mejora de la sensibilidad a la insulina. Investigaciones más recientes sugieren que su dieta por sí sola puede alterar dramáticamente el equilibrio microbiano. De acuerdo con Jeffrey Gordon, director del Center for Genome Sciences and Systems Biology en la Universidad de Washington en St. Louis,8 una dieta rica en grasas saturadas y baja en frutas y vegetales permiten que los microbios que promueven la delgadez superen a las colonias de microbios que promueven la obesidad.
“Llevar una dieta saludable fomenta los microbios intestinales relacionados con la delgadez para incorporarse rápidamente en el intestino,” dice él.
Hablando de la obesidad y las bacterias intestinales, es importante recordar cuando toma un antibiótico o consume regularmente alimentos contaminados con antibióticos (como carne de res de CAFOs, cortesía de su uso como factor de crecimiento en el ganado), daña las bacterias benéficas en su tracto GI. Esto podría tener un notable impacto en su peso y metabolismo. Como se informó en un artículo publicado recientemente en Eco Child's Play,9 que habla de la relación entre antibiótico-intestino, microbios-obesidad:
“Ver cómo las aves de corral son engordadas con antibióticos cuando son jóvenes, un hipótesis muy lógica es que el uso temprano de antibióticos en niños podría tener el mismo efecto.”
Cómo las Bacterias Intestinales “Guían” Su Mente
El último aspecto de salud del que hablare es la relación entre la salud intestinal y la salud mental. Esta relación parece ser tan fuerte que algunos proponen a los probióticos como el nuevo Prozac. De acuerdo con artículo publicado en la edición de junio del 2013 de Biological Psychiatry,10 los autores sugieren que incluso los problemas de salud mental severos y crónicos, incluyendo el trastorno de estrés postraumático (TEPT), se podría eliminar por medio del uso de ciertos probióticos.
Dos cepas que se han afirmado tienen influencia positiva, en parte por reducir la producción de las hormonas del estrés, son Lactobacillus helveticus y Bifidobacterium longum. Otros podrían tener efectos similares, aunque se necesita realizar más investigaciones para identificarlos.
“Como una clase de probióticos, estas bacterias son capaces de producir y suministrar sustancias neuroactivas como un ácido gamma-anubibutríco (GABA) y serotonina, que actúan como ejes entre el cerebro-intestino. La evaluación preclínica en roedores sugiere que ciertos psicobióticos poseen actividad antidepresiva o ansiolítica. Los efectos podrían ser mediados por el nervio vago, médula espinal o sistemas neuroendocrinos,” afirma el artículo.11
Con el uso de imágenes por resonancia magnética, el Dr. Emeran Mayer, un profesor de medicina y psiquiatría en la Universidad de California, también está comparando la estructura física del cerebro de miles de voluntarios, buscando las conexiones entre la estructura cerebral y los tipos de bacterias encontrados en sus intestinos. Hasta ahora, él ha encontrado diferencias en cómo están conectadas ciertas regiones cerebrales, dependiendo de la especie dominante de bacteria. Como lo informó NPR:12 “Eso sugiere que la mezcla especifica de microbios en nuestros intestinos podría ayudar a determinar qué tipos de cerebros tenemos- cómo se desarrollan nuestros circuitos cerebrales y cómo están programados.”
La Optimización de Su Flora Intestinal Podría Ser Una de las Estrategias de Prevención Más Importantes
Toda esta información realmente debería llevarlo a la conclusión de que la optimización de su flora intestinal es de suma importancia para la prevención de enfermedades, incluyendo la prevención del cáncer. Volver a sembrar su intestino con bacterias benéficas es esencial para mantener un equilibrio apropiado aquí. Como lo mencioné anteriormente, las bacterias benéficas ayudan a mantener a los microbios y hongos patogénicos bajos control, evitando que estos últimos tomen el control. A la luz de esto, aquí mis recomendaciones para optimizar sus bacterias intestinales.
- Los alimentos fermentados son la mejor ruta para una salud digestiva óptima, siempre y cuando consuma versiones hechas de forma tradicional y sin pasteurizar. Opciones saludables incluyen lassi (una bebida de yogurt india, que tradicionalmente se disfruta antes de la cena), leche orgánica fermentada como el kéfir, varias fermentaciones de col, nabo, berenjena, pepino, cebolla, calabaza y zanahoria y natto (soya fermentada). Algunas de las bacterias benéficas encontradas en los alimentos fermentados también son excelentes quelantes de metales pesados y pesticidas, lo que también tendrá un efecto benéfico de salud reduciendo la carga tóxica.
Los vegetales fermentados una excelente manera de suministrar bacterias benéficas nuevamente en el intestino. Y, a diferencia de algunos otros alimentos fermentados, tienden a ser agradables para el paladar para la mayoría de las personas. Como bono extra, también pueden ser una excelente fuente de vitamina K2 si los fermenta usted mismo utilizando un cultivo de inicio. Tenemos muestras de vegetales fermentados orgánicos de alta calidad hechos con un cultivo de inicio probado y un porción (de dos a tres onzas) contenía tan sólo 10 trillones de bacterias benéficas, pero también tenía 500 mcg de vitamina K2, que actualmente sabemos es un co-nutriente vital tanto de la vitamina D y el calcio. La mayoría de los suplementos de probióticos de alta intensidad tan sólo le proporcionara una fracción de las bacterias benéficas encontradas en los vegetales fermentados hechos en casa, así que también es su ruta más económica para una salud intestinal óptima.
- Suplemento de probióticos. Aunque no soy un gran defensor de tomar mucho suplementos (ya que creo que la mayoría de los nutrientes que necesita provienen de los alimentos), los probióticos son una excepción si usted no come alimentos fermentados de forma regular.
Además de saber qué añadir a su alimentación y estilo de vida, es igual de importante saber qué evitar y esto incluye:
Antibióticos, a menos que sean absolutamente necesarios (y cuando lo sean asegúrese de sembrar continuamente su intestino con alimentos fermentados y/o suplemento de probióticos) |
Carnes y otros productos de origen animal criados de forma convencional, ya que los animales criados en CAFOs por lo general son alimentados con dosis bajas de antibióticos, además de granos transgénicos que también están relacionados con la destrucción de la flora intestinal |
Alimentos procesados (ya que tienen un contenido excesivo de azúcar, junto con otros nutrientes “muertos” que alimentan las bacterias patogénicas) |
Agua clorada y/o fluorada |
Jabón antibacteriano |
Sustancias químicas agrícolas, glifosato (Roundup) en particular |