¿Las vacunas antiCOVID son responsables del aumento en la mortalidad?

Análisis escrito por Dr. Joseph Mercola Datos comprobados

Mortalidad inducida por las vacunas antiCOVID

Historia en Breve

  • De acuerdo con las estadísticas de mortalidad por todas las causas, ajustadas al crecimiento de la población, la cantidad de personas en Estados Unidos que han muerto entre enero de 2021 y agosto de 2021 es un 14 % más alta que la cantidad del 2018, el año anterior al COVID, y un 16 % más alta que la tasa de mortalidad promedio entre 2015 y 2019
  • La vacuna antiCOVID mató alrededor de 1018 personas por cada millón de dosis administradas durante los primeros 30 días de la campaña europea de vacunación
  • Al contar solo las muertes categorizadas como muertes por COVID-19, se estima que la cantidad de muertes por las vacunas es de entre 200 y 500 muertes por cada millón de dosis administradas. Se han administrado 4 mil millones de dosis en todo el mundo, lo que significa que de 800 000 a 2 millones de las “muertes por COVID-19” podrían ser en realidad muertes inducidas por las vacunas
  • Los datos de 23 países demuestran que la cantidad de nuevos casos de COVID (es decir, pruebas positivas), después de que inició la campaña de vacunas antiCOVID, es 3.8 veces mayor que antes de que se implementaran, mientras que la tasa diaria de muerte por COVID es 3.82 veces mayor

De acuerdo con las estadísticas de mortalidad por todas las causas,1 la cantidad de personas en Estados Unidos que han muerto entre enero y agosto de 2021 es un 16 % más alta que la de 2018, el año anterior al COVID con la mayor mortalidad por todas las causas, y un 18 % más alta que la tasa de mortalidad promedio entre 2015 y 2019. Al hacer un ajuste en el crecimiento de la población de alrededor del 0.6 % anual, la tasa de mortalidad en el 2021 está un 16 % por encima del promedio y un 14 % por encima de la tasa del 2018.

La pregunta obvia es ¿por qué han muerto más personas en el 2021 (de enero a agosto) a pesar de que las vacunas antiCOVID se empezaron a aplicar en diciembre de 2020? ¿El COVID-19 aumentó la cantidad de muertes a pesar de la vacuna, o las personas mueren a tasas más altas debido a las vacunas antiCOVID?

Mortalidad inducida por las vacunas

En una serie de dos partes,2 Matthew Crawford, del portal Rounding the Earth, analizó las estadísticas de mortalidad antes y después de que se implementaran las vacunas antiCOVID. En la primera parte,3 demostró que las vacunas mataron a casi 1018 personas por cada millón de dosis administradas (tenga en cuenta que se trata de dosis, no de la cantidad de personas vacunadas) durante los primeros 30 días de la campaña de vacunación europea.

Después de ajustar las muertes categorizadas como muertes por COVID-19, se le ocurrió una estimación de 200 a 500 muertes por millón de dosis administradas. Se han administrado 4 mil millones de dosis en todo el mundo, lo que significa que de 800 000 a 2 millones de las 'muertes por COVID-19', en realidad podrían ser muertes inducidas por las vacunas. Como lo explicó Crawford:4

"Esto ni siquiera incluye las muertes inducidas por las vacunas que no se han registrado como casos de COVID, aunque sospecho que esta última cantidad es menor, ya que la mejor forma de ocultar la señal de mortalidad de la vacuna es esconderla a través de la cantidad de muertes por COVID que ya se establecieron".

Al corroborar los cálculos de Crawford nos encontramos con los datos de Noruega, donde se reportaron 23 muertes después de que solo 40 000 noruegos recibieran la vacuna antiCOVID.

Sin tener en cuenta la posibilidad de una notificación incompleta de Noruega, esto nos da una tasa de mortalidad de 575 muertes por millón de dosis administradas. Además, después de realizar autopsias en 13 de esas muertes, se determinó que las 13 estaban relacionadas con la vacuna antiCOVID. De acuerdo con lo que informó el diario Norway Today en enero de 2021:5

"'Los informes podrían indicar que los efectos secundarios comunes de las vacunas de ARNm, como fiebre y náuseas, podrían haber provocado la muerte de algunos pacientes con condiciones delicadas', señaló el médico Sigurd Hortemo de la Agencia Noruega de Medicamentos.

La Agencia Noruega de Medicamentos y el Instituto Nacional de Salud Pública (FHI, por sus siglas en inglés) evalúan todos los reportes de efectos secundarios. El FHI como resultado actualizó la guía de vacunas con nuevos consejos para los adultos mayores con condiciones delicadas.

'Si padece una condición delicada, tal vez no debería vacunarse', dijo Steinar Madsen, de la Agencia Noruega de Medicamentos, durante un seminario web sobre la vacuna".

Publicidad
Sabe a azúcar, aumenta la longevidad y mejora el estado de ánimoSabe a azúcar, aumenta la longevidad y mejora el estado de ánimo

¿La vacuna antiCOVID es responsable de todas las muertes?  

Crawford analiza los datos de países que tienen un uso sustancial de vacunas y que tienen tasas muy bajas de COVID-19. De esta manera, puede tener una mejor idea de si las vacunas antiCOVID podrían ser responsables del exceso de muertes.

Identificó a 23 países que se ajustan a este criterio, lo que representa unos 1880 millones de personas, aproximadamente una cuarta parte de la población mundial. Antes de que se implementaran las vacunas antiCOVID, estas naciones reportaron un total de 103.2 muertes por millón de habitantes relacionadas con el COVID. Cinco naciones tuvieron más de 200 muertes por millón a causa del COVID, mientras que siete tuvieron menos de 10 muertes por millón.

Al 1 de agosto de 2021, el 25.35 % de los habitantes de estas 23 naciones habían recibido una dosis de la vacuna antiCOVID y el 10.36 % se consideró como completamente vacunado. En total, se habían administrado 673 millones de dosis. Con base en estos datos, Crawford estima que la tasa de mortalidad por millón de dosis de vacuna es de 411, una cantidad que está dentro del rango de 200 a 500 que calculó en la primera parte.

La cantidad de casos nuevos de COVID (es decir, pruebas positivas), después de que inició la campaña de vacunas antiCOVID, es 3.8 veces mayor que antes de que se implementaran las vacunas, mientras que la tasa diaria de muerte por COVID es 3.82 veces mayor.

Marruecos y Arabia Saudita fueron los únicos dos países en los que la tasa de casos y la tasa de mortalidad por COVID disminuyeron después de que comenzó la campaña de vacunación. "Si las muertes aumentaron a 3.82 debido a las vacunas, entonces hubo 276 465 muertes durante este período de tiempo", escribe Crawford.

En resumen, después de eliminar a las naciones con más de 100 muertes por millón a causa del COVID, antes de su programa de vacunación (para evaluar solo el impacto de las vacunas), se llegó a un numero de 13 países con una población combinada de 354 millones.

La cantidad de dosis administradas en estos 13 países es similar al de la cohorte original. La cantidad ajustada de muertes por millón ahora es de 318, que todavía está dentro del rango de 200 a 500 por millón.

Sin embargo, de manera sorprendente, la cantidad de muertes por COVID en estos 13 países es 11.61 veces mayor después de recibir la vacuna, en comparación con antes de que se implementaran. ¡En 5 de los 13 países, se han registrado un 90 % de muertes por COVID-19 después de que comenzaran las campañas de vacunación! Esto borra cualquier fantasía de que las vacunas antiCOVID de verdad funcionen.

"A primera vista, estos resultados refuerzan el caso de que las vacunas experimentales matan a las personas", escribe Crawford. "Por lo menos, esta es una señal más impresionante de la falta de seguridad que debería impulsar a las autoridades para que se preocupen por nuestra salud y sepan cómo depurar los datos que no analizan y que todos desconocemos.

Lo que es más preocupante es que muchas de estas naciones, ubicadas principalmente en Asia, parecían no tener ninguna susceptibilidad a la pandemia antes de la vacuna. Existen muchas teorías sobre por qué las vacunas podrían provocar muertes.

¿Las pruebas de PCR podrían captar señales de virus atenuados de las vacunas y dar como resultado explosiones de casos para coincidir con las [nuevas] muertes?

¿Es posible que algunas de estas vacunas tengan una mala producción? ¿Esto podría contribuir a más casos y muertes?

Paraguay cuenta la mayor mortalidad inducida por las vacunas. Se destaca como una de las únicas naciones de la Tierra que utiliza vacunas tanto chinas como occidentales. ¿Existe alguna razón por la que tal combinación podría causar una propagación más volátil de la enfermedad?

¿En realidad creemos que el grupo de expertos de la FDA y de los CDC desconocen por completo estas observaciones?

Mientras tanto, las autoridades sanitarias todavía parecen no tener problemas con la falta de reportes de riesgos o de análisis de riesgos y beneficios realizados por cualquiera de los fabricantes de vacunas o cualquier otra persona. Esto me parece una de las peores señales de que las corporaciones se apoderaron del gobierno a un nivel completo".

Un denunciante de Estados Unidos destaca la falta de denuncias

A mediados de julio de 2021, la organización America's Frontline Doctors, representada por la firma de abogados Renz Law,6 presentó una demanda7 contra el secretario del Departamento de Salud y Servicios Humanos de Estados Unidos, Xavier Becerra. En esa demanda, citan el testimonio de un denunciante que es un programador de computadoras con experiencia en análisis de datos de atención médica y con acceso a datos de Medicare y Medicaid.

De acuerdo con este denunciante, el Sistema de Notificación de Reacciones Adversas a las Vacunas (VAERS) de Estados Unidos no notifica todas las muertes causadas por las vacunas antiCOVID. Afirma que la cantidad de personas en Estados Unidos que han perdido la vida por la vacuna era de al menos 45 000 al 9 de julio de 2021.

En ese momento, el VAERS reportó 9048 muertes después de la vacuna antiCOVID. Ahora esa cantidad es de 16 310 (desde el 1 de octubre de 20218). Al utilizar un promedio de 5 informes sin reportar, eso nos da una cifra estimada de 81 550 muertes.

Es posible que las vacunas antiCOVID hayan matado a más de 200 000 personas en los Estados Unidos

Steve Kirsch, director ejecutivo del COVID-19 Early Treatment Fund, presentó cifras aún más impresionantes. En el video titulado "Vaccine Secrets: COVID Crisis",9 argumenta que el VAERS se puede utilizar para determinar la causalidad y muestra cómo sus datos indican que más de 212 000 personas en Estados Unidos han muerto por las vacunas antiCOVID.10

También han resultado perjudicados de alguna manera entre 2 y 5 millones de personas. Kirsch confía tanto en su análisis que ofreció una beca académica de un millón de dólares a cualquier persona que pueda demostrar que su análisis es malo por un factor de cuatro o más. Incluso ofreció 1 millón de dólares a cualquier funcionario que desee tener un debate público con él sobre los datos, y nadie ha aceptado el desafío.

El obituario de una mujer responsabiliza a la vacuna antiCOVID de su muerte

Aunque podría ser un desafío determinar cuántas personas han muerto como resultado de las vacunas antiCOVID, podemos estar seguros de que existen muchas muertes.

El obituario de una mujer de Oregon11 se volvió viral después de que su familia dijo que los efectos secundarios de la vacuna antiCOVID-19 habían causado su muerte. La familia no se anduvo con rodeos y denunció a los gobiernos estatales y locales por sus "mandatos de vacunas con mano dura". Jessica Berg Wilson dejó un esposo y dos hijas pequeñas, de 5 y 3 años.

"Jessica Berg Wilson, de 37 años, de Seattle, Washington, falleció rodeada de su amada familia y de manera inesperada el 7 de septiembre de 2021, a raíz de una trombocitopenia trombótica inmunitaria inducida por la vacuna antiCOVID-19 (VITT).12

Jessica era una madre joven de 37 años muy saludable y radiante sin problemas de salud. Los gobiernos locales y estatales estaban decididos a quitarle el derecho de consultar su juicio y de disfrutar de su libertad.

Se había opuesto a recibir la vacuna, ya que sabía que gozaba de buena salud y que era joven y, por lo tanto, no corría riesgo de contraer una enfermedad grave. En su mente, los riesgos conocidos y desconocidos de la vacuna significaban una amenaza.

Pero, poco a poco, día a día, su libertad de elección disminuyó. Su pasión por participar en la educación de sus hijos, que incluía ser una 'Room Mom', se detuvo por los mandatos del gobierno.

Al final, prevalecieron las personas que decidieron cerrar las puertas y separaron a las madres de sus hijos. A Jessica le costó la vida. A sus hijos les costó el abrazo amoroso de su cariñosa madre. Y a su esposo le costó el amor sagrado de su devota esposa".

Foto de Jessica con su familia

Foto de Jessica (asesinada por la vacuna antiCOVID) con su familia.

Los efectos de la vacuna antiCOVID disminuyen muy rápido

Para colmo de males, existe una amplia evidencia que demuestra que cualquier beneficio que obtenga de la vacuna antiCOVID es de corta duración, lo que requiere que arriesgue la vida y el brazo una vez más con otra dosis de refuerzo (y tal vez más en el futuro).

Entre esos conjuntos de datos incriminatorios se encuentra un análisis de Humetrix,13 que evaluó la efectividad de las vacunas de ARNm antiCOVID-19 contra la variante delta, entre 5.6 millones de beneficiarios de Medicare, de 65 años o más. Las tres preguntas clave que respondió el análisis de datos son las siguientes:

  1. ¿La efectividad de la vacuna disminuye con el tiempo?
  2. ¿La efectividad de la vacuna es menor para la variante delta?
  3. ¿La necesidad de una dosis de refuerzo varía según la subpoblación?

El resumen ejecutivo presenta las respuestas:

  1. Sí, la efectividad de las vacunas de Moderna y Pfizer disminuye muy rápido en esta cohorte.
  2. A mediados de agosto de 2021, la efectividad de la vacuna contra la variante delta era solo del 41 % y la efectividad contra la hospitalización debido a la variante delta era del 62 %, ambas "más bajas de lo que se reportó en un principio".
  3. Las vacunas fueron menos efectivas en las personas mayores de 75 años, y un modelo de riesgo de repunte hospitalario sugiere dar prioridad a las personas mayores de 65 años para recibir las dosis de refuerzos.

El repunte de infecciones no parece tan raro en los adultos mayores

De acuerdo con Humetrix, entre enero de 2021 y el 14 de agosto de 2021, 5.6 millones de beneficiarios de Medicare (de 20 millones) recibieron las dos dosis de Pfizer o Moderna, o la única dosis de Janssen.

De ellos, 148 000 se infectaron con el virus después de recibir la vacuna, 30 000 requirieron hospitalización y 9400 necesitaron cuidados intensivos. Eso significa que las infecciones progresivas en este grupo de edad ocurren a una tasa de casi 1 en cada 38, lo que no me parece tan raro.

De acuerdo con la guía de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, los pacientes solo se consideraron completamente vacunados dos semanas después de recibir la segunda dosis. Por lo tanto, no se contabilizaron las personas que desarrollaron síntomas de COVID-19 antes de esa fecha.

Aunque el análisis reporta el éxito, dice que la tasa de hospitalización por el repunte de infecciones se redujo en un tercio en comparación con la tasa de hospitalización entre marzo y diciembre de 2020, mientras que la tasa de mortalidad por repunte de infecciones se redujo seis veces, pero a pesar de eso aún existe un problema.

Las vacunas no lo protegen por mucho tiempo. La tasa de repunte de infección a los cinco y seis meses después de la vacuna es el doble de la tasa a los tres y cuatro meses después.

Si se tiene en cuenta que el riesgo de lesiones letales por la vacuna es alto en los adultos mayores, como señaló la Agencia Noruega de Medicamentos, iniciar con una rutina de dosis de refuerzo me parece una idea que solo causará angustia en las familias de todo el mundo.