¿Comer Carne Realmente Aumenta Su Riesgo de Enfermedades Cardíacas?

Carne Roja

Historia en Breve

  • Las bacterias del intestino humano pueden metabolizar la L-carnitina, una sustancia que se encuentra en las carnes rojas, bebidas energéticas y suplementos alimenticios, y al hacerlo producen un subproducto llamado N-óxido trimetilamina (TMAO, por sus siglas en inglés)
  • La evidencia preliminar sugiere que es posible que TMAO estimule los depósitos de placa de grasa para formarse dentro de las arterias; cuanta más cantidad de TMAO tenga en la sangre, el riesgo de enfermedades cardiacas podría ser mayor
  • La nueva investigación ha recibido mucha atención de los medios, lo que sugiere que el consumo de carne roja podría aumentar el riesgo de enfermedades cardiacas. Los expertos en nutrición no están de acuerdo, al señalar las muchas debilidades del estudio
  • La creciente investigación indica que las colonias de bacterias que residen en el intestino podrían desempeñar un papel clave en el desarrollo de enfermedades crónicas; al optimizar a sus bacterias intestinales favorece promover la salud, en vez de causar enfermedades, esos procesos son esenciales

Por el Dr. Mercola

La microflora de su cuerpo está compuesta de casi 100 trillones de bacterias, hongos, virus y otros microorganismos, y es cada vez más claro que estos pequeños organismos desempeñan un papel importante en su salud.

Recientemente, los microbios intestinales fueron particularmente notables en las noticias, y uno de los estudios de los que más se habla sugiere que las bacterias intestinales podrían desempeñar un papel en el riesgo de enfermedades cardiacas a través de un mecanismo sorprendente: la descomposición de un compuesto muy consumido en las proteínas conocido como L-carnitina.

Como resultado de ello, los medios de comunicación han montado una campaña virtual para advertir que las personas que comen carne roja podrían tener un mayor riesgo de enfermedades cardiacas. Pero, ¿realmente la investigación sustenta esa afirmación?

Algunos expertos en nutrición no están de acuerdo, al señalar las muchas debilidades en el estudio, y la razón por la que renunciar a la carne para evitar enfermedades cardiacas podría ser prematura, si no es que completamente mala.

Este estudio de 6 personas podría ser uno de los peores y más publicitados desde el ataque de los medios el año pasado, que estableció que los huevos eran tan malos como fumar.

¿Será la Composición de la Microflora una Nueva Explicación del Vínculo entre la Carne Roja y las Enfermedades Cardíacas?

Se declaró ampliamente que el consumo de carne roja causaba enfermedades cardiacas, una relación que a menudo es culpada (incorrectamente) por su impacto en los niveles de colesterol. Sin embargo, la investigación ha demostrado repetidamente que no hay conexión entre el colesterol alimenticio y las enfermedades cardiacas.

Por lo tanto, aunque el estudio presentado podría ofrecer pistas intrigantes acerca de la importancia de las bacterias intestinales, y cómo estas son influenciadas por la alimentación, es cuestionable que sea del todo correcta esta última hipótesis que vincula a las enfermedades cardiacas a través de otra vía con el consumo de carne roja.

Por ejemplo, un estudio de Harvard realizado en el 2010 no encontró ninguna evidencia de que el consumo de carnes rojas ocasione enfermedades cardiacas. 1

Dicho lo anterior, el estudio presentado y publicado en Nature Medicine 2 pretende esclarecer un poco acerca de por qué algunas de las personas que consumen carne roja desarrollan enfermedades cardiacas, mientras que otras no lo hacen--y la razón podría provenir de las diferencias entre las bacterias intestinales.

El estudio,3 realizado por investigadores de la Clínica de Cleveland, descubrieron que las bacterias del intestino humano pueden metabolizar la L-carnitina, una sustancia que se encuentra en las carnes rojas, bebidas energéticas y suplementos alimenticios, y al hacerlo producen un subproducto llamado N-óxido trimetilamina (TMAO ).

Se cree que TMAO estimula a los depósitos de placa de grasa para formarse dentro de las arterias (aterosclerosis), y por lo tanto, cuanta más cantidad de TMAO tenga en la sangre mayor podría ser su riesgo de enfermedades cardiacas.

Curiosamente, las personas con una alimentación alta en L-carnitina; es decir, los consumidores de carne, tuvieron una composición de microbios intestinales más propensa a la formación de TMAO, mientras que en los vegetarianos y veganos no fue así el caso.

Incluso después de consumir grandes cantidades de L-carnitina en un filete o suplemento, los vegetarianos y veganos del estudio no produjeron cantidades significativas de TMAO.

Los autores creen que esto significa que el consumo de carne roja altera su flora intestinal de una manera que predispone su cuerpo hacia la producción TMAO, y posteriormente, a las enfermedades cardiacas. Esto fue confirmado al suministrarles a los omnívoros un tratamiento de antibióticos,  después de ellos no produjeron TMAO.

Stanley Hazen, MD, PhD, y autor principal del estudio, indico en una declaración que: 4

"Las bacterias que viven en nuestro tracto digestivo son regidas a largo plazo por nuestros patrones alimenticios...

En realidad, una alimentación alta en carnitina cambia nuestra composición microbiana intestinal en aquellas que les gusta la carnitina, por lo que los consumidores de carne son aún más susceptibles a que se forme TMAO y su efecto obstructor en las arterias".

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¿Será la Carne Roja Incorrectamente Identificada Como un Agente Que Fomenta las Enfermedades Cardíacas?

El último estudio no es el primero en relacionar a las bacterias intestinales con las enfermedades cardíacas.

En el 2011, los mismos investigadores, Hazen y sus colegas, utilizaron datos de cerca de 2 000 personas y demostraron que cuando las bacterias intestinales descomponen lecitina--un tipo de grasa que se encuentra en los alimentos de carne, huevos, productos lácteos y otros animales, además de productos panificados y suplementos alimenticios--y a su metabolito colina, también provoca la producción de TMAO y, posteriormente, aumenta el riesgo de enfermedades cardiacas.5

En respuesta a esto y el estudio actual, muchos se han preguntado si los alimentos de carne roja y de otros animales, junto con los suplementos que contienen L-carnitina, lecitina o colina, deberían ser evitados. Chris Masterjohn, PhD, de la Universidad de Illinois, quien actualmente investiga a los suplementos solubles en grasas, refutó los descubrimientos realizados en el 2011 que indican:6

"...Los estudios previos han demostrado que de hecho, los suplementos con sales de colina libre generan TMAO, pero no lo produce la fosfatidilcolina no contaminada, que es la principal forma de colina que se encuentra en los alimentos.

Por otro lado, los alimentos ricos en colina, como el hígado y los huevos, no produjeron más cantidad de TMAO que un desayuno de control, pero los mariscos, los cuales generalmente están contaminados con un poco de trimetilamina o TMAO, si lo hicieron".

Masterjohn tampoco está de acuerdo con los últimos descubrimientos del grupo, en el que los investigadores afirman que la carnitina en la carne roja contribuye a las enfermedades cardiacas a través de la misma vía; es decir, al producir TMAO.

De acuerdo con Masterjohn, el informe de los datos incompleto en el artículo combinado con "incontroladas inferencias salvajes" hechas por la prensa, han generado una imagen sumamente engañosa acerca del impacto de las carnes rojas en las enfermedades cardiacas, mientras que al mismo tiempo ignoran el grupo alimenticio que realmente genera la mayoría de TMAO.

Él señala que la carne roja solo es uno de los muchos alimentos que aumentan la cantidad de TMAO, cuando es consumida, y cita datos de un estudio realizado en 1999 que evaluó la excreción de TMAO tras el consumo de 46 alimentos diferentes, lo que demuestra que la carne roja genera una cantidad de TMAO que no supera a la de las frutas y vegetales.

De hecho, algunos vegetales, como los chícharos, coliflor y zanahorias ¡generaron más cantidad de TMAO que la carne! Pero aun así, ninguno de los alimentos generó niveles de TMAO que fueran estadísticamente diferentes a los del control. (De manera similar, no hubo diferencia estadísticamente significativa entre los diferentes tipos de carnes, en comparación con el de control).

Investigaciones Anteriores Muestran Que los Mariscos Producen Mayor Cantidad de TMAO Que Cualquier Otro Alimento, Incluyendo a la Carne de Res

No obstante, el estudio realizado en 1999 mostró que un grupo de alimentos se destacó como una importante fuente de TMAO, y que eran los mariscos. Prácticamente todos los peces e invertebrados, con pocas excepciones (como la trucha y berberechos) produjeron una cantidad de TMAO estadísticamente mayor que el "desayuno ligero" del control, por sí solo.

Y, de acuerdo con la propia prueba estadística de Masterjohn, todos los invertebrados, excepto las almejas y berberechos, y todos los peces, excepto el atún, la trucha, la platija, y la hueva producen una cantidad significativamente mayor de TMAO que la carne de res. Él escribe:

"La única "hembra omnívora representativa" del artículo de [2013] Nature Medicine7 excretó cantidades similares de TMAO en su orina como los seis sujetos del estudio realizado en 1999 después de consumir la carne roja, lo que sugiere que, tuvieron que medir la respuesta a los mariscos; además, los autores del artículo de Nature Medicine habrían descubierto una excreción de TMAO mucho mayor posteriormente al consumo de mariscos, que después del consumo de carne roja.

En el artículo de 1999, la diferencia entre los mariscos y la carne roja es como la diferencia entre el día y la noche. Para tomar un ejemplo más extremo, el pez hipogloso genero una cantidad más de 107 veces mayor de TMAO que la carne roja.

A partir de este estudio parece obvio que si algún alimento debe ser señalado por su producción de TMAO, deberían ser los mariscos.

Sin embargo, el artículo de Nature Medicine no menciona los peces y el artículo de The New York Times8 solo menciona a los peces para señalar que tienen menor cantidad de carnitina que la carne roja (y, por tanto, por inferencia, generarán menos TMAO, aunque es claro que este no es el caso, presumiblemente porque los mariscos tienden a estar contaminados con trimetilamina o el mismo TMAO...)

Si hemos de señalar a la carne roja como fuente de TMAO, debemos ser capaces de identificar otros alimentos con los cuales debe ser reemplazada, que generen menor cantidad de TMAO.

No obstante, este estudio realizado en 1999, que tuvo un pequeño tamaño de muestra--pero proveyó un amplio número de alimentos--descubrió que básicamente existen otros alimentos que generan una cantidad significativamente menor de TMAO, que la carne roja".

Eliminar la Carne de Res Para Prevenir Enfermedades Cardiacas Parece Ser Otra Pista Falsa...

Chris Kresser, L.Ac, también ha intervenido en este asunto,9 al comparar la hipótesis de que la carne roja causa enfermedades cardiacas a través de TMAO, a la noción claramente falsa de que el colesterol alimenticio y la grasa saturada causan enfermedades cardiacas, al elevar el colesterol sérico. Kresser enumera tres razones para no tomar el estudio presentado en su valor nominal:

  1. Evidencia epidemiológica inconsistente
  2. Parcialidad del "usuario saludable", y
  3. Evidencia inconclusa e insuficiente acerca del rol de TMAO en las enfermedades cardiacas

"... Incluso si los consumidores de carne Paleo tienen niveles más altos de TMAO que los veganos y vegetarianos, todavía no tenemos pruebas que demuestren una relación causal entre las enfermedades cardiovasculares y TMAO", escribe.

"Una vez más, la supuesta relación entre el colesterol, la grasa saturada y las enfermedades cardiacas debe servir como un recordatorio para no sacar conclusiones precipitadas que priven a las personas de alimentos saludables y ricos en nutrientes. Es prácticamente imposible controlar todos los posibles factores de confusión".

¿Debería Evitar la L-Carnitina, y a los Suplementos y los Alimentos Ricos en Colina?

Masterjohn realiza una crítica a fondo de los datos del estudio presentados en su reciente artículo de Weston A. Price,10 por lo que para obtener más información recomiendo leerlo en su totalidad.

Por ejemplo, señala que el estudio no incluye ningún dato acerca de comer solo carne (la carne fue consumida con un suplemento de carnitina); además, los datos no indican si las diferencias en TMAO se deben a un solo valor atípico o una diferencia fundamental entre géneros, o si el tratamiento con antibióticos es un factor de confusión, ya que a ninguno de los veganos se le suministro antibióticos.

De acuerdo con Masterjohn:

"En este artículo no hay datos que muestren que TMAO aumenta en respuesta a quien consuma solo carne".

En este momento, se necesita aún más investigación para apoyar la hipótesis de que deben ser evitados la carne roja y otros alimentos de origen animal, junto con suplementos que contienen L-carnitina, lecitina o colina. Lo que es más, estas sustancias se encuentran naturalmente en una amplia gama de alimentos, por lo que es casi imposible, y probablemente no se recomiende evitarlos por completo.

En términos de L-carnitina, una alimentación omnívora proporciona de 20 a 200 mg/día, en comparación con una alimentación vegetariana estricta, lo que añadiría aproximadamente 1 mg/day.11

Pero incluso las fórmulas sin lácteos para lactantes a veces son enriquecidas con L-carnitina, y además, la sustancia se encuentra en los mariscos, pechuga de pollo, aguacate y queso (aunque en cantidades mucho menores que las que se encuentran en las carnes rojas, especialmente la carne de res).

Asimismo, es importante considerar que tanto la L-carnitina como la colina son nutrientes esenciales que su cuerpo necesita. Por ejemplo, la colina, está vinculada a los cambios epigenéticos beneficiosos en fetos, que probablemente duran hasta la edad adulta, mientras que la L-carnitina ha demostrado mejorar la sensibilidad a la insulina en la diabetes tipo 2.

Masterjohn también señala que si bien, había diferencias significativas en las cepas bacterianas intestinales entre los omnívoros y veganos, lo que podría explicar por qué los niveles de TMAO eran 45 % mayores en los consumidores de carne, es posible que la flora intestinal no sea la única respuesta para ello. Escribe:

"Si bien es posible que la flora intestinal explique la diferencia, es decepcionante que los autores no consideren otras posibilidades, como las diferencias en la actividad de la enzima que convierte la trimetilamina en TMAO. Por ejemplo, la vitamina B2 que es el principal cofactor para la enzima, y los veganos son tres veces más propensos a tener deficiencia de vitamina B2, al igual que los vegetarianos y omnívoros.

...Aunque los antibióticos acaban con los niveles de TMAO en humanos y ratones, lo cual demuestra que las bacterias intestinales son necesarias para su formación, los autores no proporcionan pruebas claras de que las diferencias específicas en las bacterias intestinales entre los vegetarianos y veganos, por un lado, y los consumidores de carne, por el otro, causen la diferencia observada en los niveles de TMAO.

No está claro si un nivel 45 % más alto de TMAO en las personas que comen carne representa o no algo que debemos considerar como "poco saludable". Como fue señalado anteriormente, por lo que sabemos, la deficiencia entre los veganos podría ser debido a la riboflavina (vitamina B2)".

El Vínculo Entre los Granos Enteros y las Bacterias Intestinales Que Causa la Producción de TMAO

Asimismo, Jeff Leach junto con Human Food Project ha ponderado el estudio presentado. Bien vale la pena leer su artículo completamente. Él expone muchos de los mismos problemas de Masterjohn y Kresser, pero también centra gran parte de su análisis en el papel de las bacterias intestinales en la conversión de la carnitina en TMAO. Él escribe, en parte:12

"Si por el momento asumimos que TMAO puede acelerar la aterosclerosis, entonces observamos que los niveles enriquecidos de Prevotella están relacionados con niveles más altos en este, lo que hace que TMAO sea más interesante--especialmente ya que el enriquecimiento de este grupo de bacterias parece ocurrir en los veganos y vegetarianos, así como en los omnívoros. Entonces, ¿qué causa el enriquecimiento de Prevotella?

En un artículo publicado en el 2010, los investigadores italianos encontraron que los niños africanos rurales en Burkina Faso tenían unos niveles muy altos de Prevotella, mientras que un grupo de niños de una edad similar en los suburbios de Italia no tenían nada.

La diferencia notable en la alimentación de los niños en Burkina Faso y los niños italianos fue el consumo de granos completos... los cereales integrales conforman una cantidad 50% mayor de las calorías diarias en este pueblo [africano]... Por el contrario, los niños italianos consiguieron ~25% de sus calorías diarias del pan, galletas, pasta y arroz altamente procesados...

Generalmente, una alimentación mucho más variada, aunque aparentemente desprovista de granos enteros, pero alta en alimentos procesados. Como se mencionó, los niños italianos no tenían cantidades detectables de Prevotella en sus muestras de heces...

En el artículo de Burkina Faso, los investigadores atribuyeron los altos niveles de Prevotella a los carbohidratos de los cereales... En general, no parece que la fibra alimenticia impulse el enriquecimiento de Prevotella... Por lo tanto, parece que de alguna manera específica el almidón o la fibra alimenticia en los granos".

La Principal Cuestión...

De acuerdo con Masterjohn, interpretar el estudio presentado "como una crítica a la carne roja, no tiene sentido".

"Incluso si los niveles fisiológicos de TMAO contribuyen a las enfermedades cardiacas en los seres humanos (que en esta cuestión es un gran 'Y si') e incluso si la carne roja fuera para elevar sustancialmente los niveles de TMAO más que la mayoría de los demás alimentos (lo que parece ser falso), no sería de ningún modo que comer carne roja cause enfermedades cardiacas.

Los efectos biológicos de un alimento posiblemente no pueden ser reducidos a uno de los efectos biológicos de uno de los componentes alimenticios.

Creer tal cosa requeriría creer que el elemento en cuestión no solamente no tiene otros efectos biológicos relevantes, sino que no hay efectos biológicos pertinentes de parte de cualquiera de las otras decenas de miles de componentes de ese alimento...

Sin embargo, si la carnitina en la carne roja promovió la aterosclerosis a través de su conversión a TMAO, entonces, la carne roja no debe ser más peligrosa que las papas y las zanahorias, y el asesino real deberían ser los mariscos. ¿Qué tan probable es que esto sea cierto?"

De hecho... Innumerables estudios han demostrado los beneficios para la salud asociados con una alimentación rica en pescados y mariscos, incluyendo su valor para prevenir enfermedades cardiacas. En lo personal, creo que la mejor opción no es evitar consumir estas sustancias posiblemente beneficiosas, sino optimizar sus bacterias intestinales para favorecer que la salud sea estimulada, en vez de los procesos que causan enfermedades.

Analizar Su Aliento Podría Revelar Bacterias Intestinales Relacionados Con la Obesidad

Otra área en la que las bacterias intestinales son notables, está relacionada con su peso. Un estudio del mes pasado reveló que hasta el 20 % de pérdida de peso sustancial logrado por un bypass gástrico--una popular cirugía de pérdida de peso--en realidad es debido a los cambios en el equilibrio de las bacterias en su tracto digestivo.13

Asimismo, otra investigación ha revelado que un análisis de aliento en relación a los gases emitidos por sus bacterias intestinales puede ayudar a predecir la probabilidad de convertirse en obeso. El estudio descubrió que las personas con altos niveles de hidrógeno y metano en la respiración son más propensas a tener un mayor índice de masa corporal (BMI, por sus siglas en inglés) y una proporción de grasa corporal.14

Los investigadores creen, que esto podría ser debido a que las bacterias intestinales relacionadas influyen en la capacidad del cuerpo para extraer calorías de los alimentos, lo que ocasiona al aumento de peso.

De igual forma, la investigación anterior ha demostrado que las personas delgadas tienden a tener mayores cantidades de diversas bacterias saludables en comparación con las personas obesas. Por ejemplo, un estudio realizado en el 2011 encontró que consumir diariamente una forma específica de bacterias del ácido láctico, podría ayudar a prevenir la obesidad y reducir la inflamación de bajo nivel. 15

En conjunto, la investigación se suma el creciente conocimiento de que probablemente nutrir el desarrollo de bacterias beneficiosas en el intestino tenga importantes beneficios para su salud y puede ser fundamental para:

  • Protegerla contra el exceso de crecimiento de otros microorganismos que pueden causar enfermedades
  • Digerir los alimentos, y absorber los nutrientes y ciertos carbohidratos
  • Producir vitaminas, y absorber minerales y eliminar toxinas
  • Prevenir alergias
  • Mantener las defensas naturales

Asimismo, numerosos estudios han demostrado que su flora intestinal desempeña un papel en:

  • Estado de ánimo, salud psicológica y comportamiento
  • Enfermedad celíaca
  • Diabetes
  • Aumento de peso y obesidad
  • Síndrome metabólico

Su Flora Intestinal Está Constantemente Bajo Ataque

Sus bacterias intestinales son vulnerables a su alimentación y estilo de vida. Si, por ejemplo, consume una gran cantidad de azúcar, cereales refinados, transgénicos y alimentos procesados, sus bacterias intestinales estarán en peligro debido a que los alimentos procesados en general destruirán su microflora saludable y nutrirán a las malas bacterias y levaduras.

Sus bacterias intestinales también son muy sensibles a:

  • Antibióticos
  • Agua clorada
  • Jabón antibacteriano
  • Productos químicos agrícolas
  • Contaminación

Debido a esto, es necesario evitar consumir alimentos refinados y procesados (igualmente, esto es esencial para prevenir enfermedades cardiacas) y volver a desarrollar de forma regular las bacterias buenas en su intestino, al tomar un suplemento probiótico de alta calidad o consumir alimentos tradicionalmente fermentados y sin pasteurizar, tales como:

  • Vegetales fermentados
  • Lassi (una bebida India de yogur, que se disfruta tradicionalmente antes de la cena)
  • Leche fermentada, como el kéfir
  • Natto (soya fermentada)

Una de las razones por las que los alimentos fermentados son tan beneficiosos es debido a que contienen bacterias de ácido láctico, así como una amplia variedad de diferentes bacterias beneficiosas.

Además, si son fermentados con un cultivo iniciador de probióticos, la cantidad de bacterias saludables en una porción de vegetales fermentados puede superar con creces la cantidad que encontrará en los suplementos probióticos comerciales, por lo que es una alternativa muy rentable. Idealmente, deberá comer una variedad de alimentos fermentados para maximizar los tipos de bacterias que consume.

Nutrir la Flora Intestinal es Uno de los Fundamentos de la Salud Óptima

Una creciente investigación indica que las colonias de bacterias que residen en el intestino pueden desempeñar un papel clave en el desarrollo del cáncer, asma, alergias, obesidad, diabetes, enfermedades autoinmunes e incluso cerebrales, el comportamiento y problemas emocionales como el trastorno por déficit de atención con hiperactividad (ADHD, por sus siglas en inglés), autismo y depresión.

Como se analizó, ahora también surge la conexión de las enfermedades cardiacas, aunque hasta el momento no me atrevería a sacar conclusiones al respecto.

En general, creo que no sería prudente tratar de eliminar los alimentos simplemente porque se sabe que aumentan la cantidad de TMAO, ya que todos son saludables y parecen incluir desde carnes hasta vegetales y mariscos.

Muy probablemente, mantener una flora intestinal sana sea de suma importancia para prevenir enfermedades cardiacas, y si elimina un alimento para proteger sus bacterias intestinales beneficiosas, serían los alimentos procesados, no los alimentos frescos completos de cualquier tipo.

Otro factor confuso que no se aborda es el hecho de que la carne de las operaciones concentradas de alimentación de animales (CAFO, por sus siglas en inglés) es una fuente oculta de antibióticos, que causa estragos en sus bacterias intestinales.

Por lo que también podrían haber desempeñado un papel. Esta es la única razón se asegurarse comprar únicamente carnes de animales alimentados con pastura y criados orgánicamente, ya que en ellos no está permitido utilizar antibióticos para estimular su crecimiento.

Las investigaciones previas han demostrado que alrededor de los 60 años, hay una número significativamente menor de bacterias intestinales.

De acuerdo con la doctora Sandra McFarlane, del grupo de biología y la microbiología intestinal en la Universidad de Dundee, las personas mayores de 60 años usualmente tienen una cantidad 1 000 veces menor de bacterias "amigables" en sus intestinos, en comparación con los adultos más jóvenes,  y mayores niveles de microbios causantes de enfermedades.16

Lo que esto significa es que es increíblemente importante nutrir activamente la salud de su flora intestinal, especialmente a medida que envejece.

Consumir alimentos fermentados debe ser su principal estrategia, pero si no le gusta el sabor de los alimentos fermentados, es definitivamente recomendable que tome un suplemento probiótico. Sin embargo, antes de renunciar a los alimentos fermentados, lo mejor es comenzar con pequeñas cantidades, como la mitad de una cucharadita y utilizarlos como condimento integrado en sus alimentos, similar a un aderezo para ensaladas.

Si aun así no desea comerlos, entonces es importante considerar que, si bien por lo general yo no abogo por tomar una gran cantidad de suplementos, una excepción sería un probiótico de alta calidad. Le recomiendo buscar un suplemento probiótico que cumpla con los siguientes requisitos, para asegurar su calidad y eficacia:

  • Las cepas de bacterias en el producto deben ser capaces de sobrevivir el ácido estomacal y la bilis, para que llegue a sus intestinos una adecuada cantidad con vida
  • Las cepas de bacterias deben tener características que estimulen la salud
  • La actividad probiótica debe ser garantizada durante todo el proceso de producción, período de almacenamiento y vida útil del producto

A lo largo mis años de práctica clínica, he encontrado que no hay un único suplemento probiótico que funcione para todos. No obstante, una mayor cantidad de personas parecen responder favorablemente al Lactobacillus sporogenes, en comparación con cualquier otro probiótico, por lo que en caso de duda, ese sería un excelente punto de partida.