Por el Dr. Mercola
¿Cuándo fue la última vez que dio o recibió un abrazo? Si ya ha pasado algún tiempo, comprometerse con dar más abrazos no solo es una medida sencilla para sentirse más feliz, sino también para estar físicamente más saludable. El contacto humano es un fenómeno complejo, relacionado con la liberación de hormonas del sentirse bien y otras reacciones fisiológicas corporales.
La acción de abrazar solo es un ejemplo, aunque es uno poderoso. Incluso en días particularmente difíciles, como cuando tiene problemas de pareja, un abrazo podría mejorar su estado de ánimo, ya que puede incrementar los sentimientos positivos y disminuir los negativos.
Asimismo, no solo son rumores; un estudio reciente publicado en el sitio web “PLOS One” reveló este hecho intrigante después de un estudio en el que participaron más de 400 adultos.1
Los participantes fueron entrevistados todas las noches durante dos semanas y se les preguntó sobre su estado de ánimo, cualquier problema con su pareja y si habían recibido un abrazo o no. Como se esperaba, los conflictos en la relación estuvieron relacionado con más sentimientos negativos, mientras que recibir abrazos produjo lo contrario.
Sin embargo, en los días en que había conflictos entre los participantes, pero también recibieron un abrazo, informaron más sentimientos positivos, en comparación con los días en que no recibieron un abrazo y el efecto positivo continuó hasta el día siguiente.
El coautor del estudio, Michael Murphy, investigador posdoctoral en el Laboratorio para el Estudio del Estrés, la Inmunidad y Enfermedades en la Universidad Carnegie Mellon, dijo para la revista Time:
"Un comportamiento tan simple y directo — como abrazar — podría ser una forma de apoyo eficaz en hombres y mujeres que experimentan problemas en sus relaciones".2
Los abrazos pueden disminuir la sensación de estrés
Aún no se conoce por completo la razón detrás de la proeza de los abrazos para hacer sentir bien, pero los investigadores de Carnegie Mellon sugieren que una faceta valiosa es su capacidad para atenuar los factores estresantes.
En particular, los abrazos "incrementan la percepción de disponibilidad de apoyo social al transmitir interés y empatía de forma tangible, sin comunicarles a los receptores que ellos mismos son ineficaces".3
En otras palabras, rodear con los brazos a alguien le demuestra físicamente que le importa y está ahí para apoyarlo, por lo tanto, reduce los niveles de estrés. Además, tanto el dador como el receptor del abrazo pueden beneficiarse.
En un estudio de 20 parejas románticas, a una persona se le realizó un escáner médico mientras que su compañero se encontraba cerca recibiendo descargas eléctricas.
Cuando se proporcionó apoyo, como sostener el brazo de un compañero cuando sentía dolor, se presentó un incremento del efecto en el cuerpo estriado ventral del cerebro, una región relacionada con las recompensas que también está involucrada en el comportamiento materno, así como en el área septal, que está vinculada con el comportamiento materno y disminución en la sensación de miedo.4
Incluso, esto sugiere que la persona que proporciona el apoyo físico también podría experimentar beneficios similares, como menor sensación de estrés.
Un abrazo de 20 segundos, junto con 10 minutos de sostener la mano, también pueden disminuir los efectos físicos dañinos del estrés, incluyendo su impacto en la presión arterial y frecuencia cardíaca. Eso es lógico, ya que se sabe que los abrazos podrían reducir los niveles de las hormonas del estrés, como el cortisol.
De hecho, cuando ocurrió tal "contacto cálido con el compañero" de forma previa a una tarea estresante como hablar ante el público, los participantes exhibieron frecuencia cardíaca y presión sanguínea baja, en comparación con los que no recibieron tal contacto.
"Estos hallazgos sugieren que tener una relación afectiva con un compañero solidario podría contribuir a disminuir la reactividad ante eventos estresantes de la vida y mediar parcialmente el beneficio del apoyo marital traducida en una mejor salud cardiovascular", señalaron los investigadores.5
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Puede beneficiar su salud cardíaca por medio de abrazos
El 21 de enero es el Día Nacional de los Abrazos, un evento creado por Kevin Zaborney, de Caro, Michigan, que según se informó era para aumentar las demostraciones públicas de emoción. Zaborney creía que abrazar podía ayudar a facilitar la comunicación humana,6 aunque también es conocido por mejorar la salud cardíaca.
Además de reducir la frecuencia cardíaca, "la experiencia emocional positiva [del abrazo] puede generar reacciones bioquímicas y fisiológicas, como una mayor cantidad de oxitocina, norepinefrina, cortisol en la sangre y cambios en la presión arterial".7
La investigación presentada en la reunión anual de 2004 de la Sociedad Americana Psicosomática también encontró que cuando las parejas hablaban en privado durante cinco minutos, miraban un video romántico y se abrazaban, las mujeres exhibían niveles más elevados de oxitocina, la "hormona del amor", junto con niveles más bajos de presión arterial y la hormona del estrés norepinefrina.
"Posiblemente lo que ocurre es... que la oxitocina desencadena cambios fisiológicos que ayudan a proteger la salud cardíaca de las mujeres", explicó el editor de la revista Critical Care Nurse.8
De hecho, otra investigación ha revelado que, en el caso de las mujeres posmenopáusicas, los abrazos frecuentes en la pareja estaban relacionados con una menor presión arterial y frecuencia cardíaca, así como mayores niveles de oxitocina.9
Dar abrazos podría mejorar su sistema inmunológico y ayudar a prevenir resfriados
Los abrazos pueden incrementar la producción de endorfinas — las hormonas del sentirse bien — en el cuerpo, lo que a su vez podría fortalecer al sistema inmunológico.10 Además, también podrían disminuir el riesgo de infección al atenuar los efectos del estrés que, si no son controlados, es posible que incrementen la susceptibilidad a las enfermedades.
Por lo general, si se encuentra bajo estrés (incluyendo el inducido por conflictos de pareja), podría tener mayor riesgo de contraer enfermedades, como el resfriado común.
Sin embargo, cuando los participantes con estrés eran expuestos al virus del resfriado, se encontró que percibir apoyo social y recibir abrazos atenuaba los efectos del estrés y protegía contra el incremento esperado en el riesgo de infección.
Como se reveló en un estudio, los abrazos proporcionaron 32 % del efecto beneficioso. El investigador principal del estudio indicó:11
"Esto sugiere que ser abrazado por una persona de confianza podría actuar como un medio eficaz para transmitir apoyo, e incrementar la frecuencia de abrazos podría ser un medio efectivo para reducir los efectos perjudiciales del estrés...
El aparente efecto protector de los abrazos podría atribuirse al contacto físico o al hecho de que los abrazos son un indicador de comportamiento de apoyo e intimidad... De cualquier manera, las personas que reciben más abrazos se encuentran un poco más protegidos contra las infecciones".
Asimismo, la presión en un abrazo puede estimular a la glándula del timo, que es responsable de la regulación y equilibrio de los glóbulos blancos,12 otra forma en que los abrazos podrían ayudar al sistema inmunológico.
El contacto ayuda a mantenerse feliz
Ya sea que se trate de un abrazo, caricia, terapia de masaje o incluso una palmadita en la espalda o toque en el brazo, el contacto humano es una parte fundamental del bienestar.
Por ejemplo, el masaje puede influir en el sistema nervioso a través de las terminaciones nerviosas en la piel, lo cual podría estimular la liberación de endorfinas e inducir la relajación y sensación de bienestar, aliviar el dolor, así como reducir los niveles de las sustancias químicas del estrés, como el cortisol y la noradrenalina.
A su vez, puede reducir la frecuencia cardíaca, respiración y metabolismo, así como disminuir la presión arterial alta. Incluso una menor cantidad de contacto físico, como una palmada en la espalda, podría generar beneficios, ya que puede ayudar a inducir confianza y contagiar la buena voluntad.
Entre los jugadores de la Asociación Nacional de Baloncesto (NBA, por sus siglas en inglés), los equipos que manifestaron mayor contacto físico exhibieron mejor desempeño, inclusive después de considerar el estado de los jugadores y rendimiento al inicio de la temporada.
"La comunicación táctil o contacto físico, puede promover la cooperación entre las personas, comunicar distintas emociones, aliviar en momentos de estrés, y utilizarse para hacer inferencias de calidez y confianza", escribieron los investigadores para la revista Emotion.
"De forma consistente con la hipótesis, el contacto al inicio de la temporada predijo un mayor rendimiento tanto en las personas como en los equipos hacia el final de la temporada".13
Incluso, el contacto se describe como un lenguaje universal que puede comunicar emociones distintas con una precisión sorprendente. Un estudio descubrió que tan solo con el contacto físico podrían revelarse emociones como la ira, miedo, disgusto, amor, gratitud y simpatía, con índices de precisión de hasta el 83 %.14
¿Se encuentra privado de afecto y necesita 'contacto piel con piel'?
Se sabe que los bebés criados sin suficiente contacto físico pueden enfrentar problemas en su desarrollo y están en mayor riesgo de presentar problemas del comportamiento, emocionales y sociales durante la etapa adulta. Sin embargo, el contacto físico puede ser una necesidad que continúe a lo largo de todas las etapas de la vida.
Las personas que son privadas de afecto padecen efectos negativos en su salud, felicidad, apoyo social y satisfacción en las relaciones. También, está vinculado a la soledad, depresión, estrés, así como trastornos del estado de ánimo y ansiedad.15
Ciertas poblaciones se encuentran en mayor riesgo que otras, entre las cuales los hombres y ancianos se posicionan en el extremo superior del espectro.
Incluso, la investigación realizada por Kory Floyd, Ph. D. de la Universidad de Arizona, sugiere que experimentamos una “crisis de contacto piel con piel”. Los habitantes de los Estados Unidos no solo viven más solos que nunca, sino que 1 de cada 4 carece de algún confidente cercano con quien hablar sobre temas importantes.
Además, escribe que 3 de cada 4 adultos están de acuerdo con la afirmación de que, "las personas en los Estados Unidos carecen de contacto piel con piel". Floyd indica lo siguiente:16
"Por lo general, relacionamos el hambre con los alimentos; pero no sentimos hambre simplemente porque queremos alimentos, sino porque los necesitamos, así como sentimos sed porque requerimos agua, y nos cansamos porque necesitamos dormir.
Nuestros cuerpos saben lo que necesitan para funcionar correctamente, y las investigaciones sugieren que el afecto pertenece a esa lista, justo después de los alimentos, agua y descanso. La falta de afecto puede generar efectos perjudiciales, al igual que la falta de alimento, agua y descanso".
Además de los riesgos para la salud que mencioné antes, las personas que necesitan contacto piel con piel también tienen mayor probabilidad de manifestar problemas para expresar e interpretar sus emociones, un padecimiento conocido como alexitimia. Además, son menos propensos a crear lazos afectivos con otras personas.
¿Cómo podría recibir más abrazos?
Muchas personas pueden obtener más abrazos en su vida simplemente al hacer el esfuerzo concertado de ser más cariñosos con sus familiares y amigos. Recuerde que dar abrazos es tan beneficioso como recibirlos, así que establezca el objetivo de dar abrazos más frecuentes a su pareja y otros seres queridos.
Si vive solo y no tiene a alguien a quien abrazar todos los días, hay otras opciones para tener más contacto en su vida.
En algunas ciudades se han creado centros profesionales de abrazos que le permiten pagar por un abrazo o caricias sin fines sexuales. Otras opciones viables podrían ser recibir un masaje o hacer una cita con un quiropráctico o maestro de reiki.
Asimismo, puede establecer el hábito de saludar con un abrazo a sus amigos. Por ejemplo, abrazar animales, como su perro o gato, también puede ser gratificante, y si no tiene esa opción, incluso podría serle de utilidad abrazar un oso de peluche.
En última instancia, cuanto mayor sea el afecto físico que reciba, es probable que se sienta más feliz y saludable. Su cuerpo necesita recibir abrazos y otras formas de contacto, al igual que requiere alimento y agua, así que debe hacer el esfuerzo de obtener más abrazos todos los días.
Si se pregunta cuál es la cantidad ideal de abrazos, la ya fallecida psicoterapeuta Virginia Satir indicaba que, "necesitamos [4] abrazos diarios para sobrevivir. Necesitamos [8] abrazos diarios para mantenimiento. Necesitamos 12 abrazos diarios para desarrollarnos".17