Una vez que los efectos sociales, económicos y médicos del COVID-19 se apoderaron de la sociedad, toda la atención se desvió de casi todas las demás preocupaciones ambientales y las relacionadas con la salud para enfocarse solo en las controversias y debates sobre cómo tratar, controlar y qué hacer con el virus, y la vacuna. Estos son solo algunos de los problemas económicos, políticos y sociales que enfrentan las personas:
• El pánico inicial provocó la compra de $ 3 mil millones en ventiladores, de los cuales, The Washington Post reportó que 79 295 no se utilizan.
• La cuestión de no saber si utilizar o no un cubrebocas se ha convertido en uno de los debates más controvertidos, a pesar de que las investigaciones de la última década demuestran que los cubrebocas de tela son ineficaces contra los virus.
• Una red de virólogos, científicos militares y empresarios biotecnológico se esconden bajo el disfraz de “biodefensa” y “biomedicina”, para crear microorganismos y aumentar el arsenal de patógenos malignos.
Pero como reporta el periodista de investigación y experto en armas biológicas Sam Husseini, los científicos de ganancia de función/guerra biológica en laboratorios como Wuhan, China, y Fort Detrick, Maryland, han sido acusados de crear tipos de investigaciones nefastas.
• Como parte de la Operation Warp Speed, Pfizer llegó a un acuerdo de $ 1 950 millones para proporcionar a los Estados Unidos 100 millones de vacunas contra el COVID-19 para ofrecerlas de forma "gratuita" a las personas, con la opción de enviar 500 millones más.
• Mientras algunas personas consideran si se someterán a otra vacuna, la Universidad de Yale realiza pruebas para determinar el tipo de mensaje que hará que más personas acepten y se apliquen la vacuna.
En otras palabras, analizan que mensajes provocaran una respuesta emocional para que las personas la acepten. Esta es una forma descarada y muy sofisticada para vender. Los tipos de mensajes que se investigan incluyen aquellos que se refieren a su libertad personal, interés propio, beneficio económico y culpa.
El mensaje principal durante esta pandemia debió haber sido sobre las medidas para proteger su salud y reducir el riesgo de sufrir complicaciones, pero no ha sido así. En cambio, se llevan a cabo pequeñas guerras por decisiones financieras donde usted podría estar involucrado.
Los rayos del sol se correlacionaron de manera negativa con las pruebas positivas
Los coronavirus humanos reciben su nombre por la aparición de la proteína Spike en la superficie. Existen cuatro subgrupos principales, el primero se identificó a mediados de la década de 1960. Hasta la fecha, los CDC han identificado siete tipos de coronavirus que pueden infectar a los humanos, incluyendo MERS, SARS y SARS-CoV-2.
Sin la fanfarria que ha acompañado al lanzamiento propuesto del remdesivir, un medicamento antiviral que cuesta $ 3 120 por dosis para tratar el COVID-19, los datos recientes demostraron de nuevo el acto simple y gratuito de la exposición a los rayos del sol para combatir el SARS -CoV-2 y otros cuatro coronavirus humanos.
El equipo de investigación comenzó con el conocimiento de que los virus de ARN, como los coronavirus humanos, son sensibles a la radiación ultravioleta de los rayos del sol y que la “incidencia y mortalidad de la enfermedad por coronavirus 2019 (COVID-19) supuestamente esta correlacionada con los niveles de vitamina D".
Al usar estos puntos como base, analizaron la correlación entre cinco tipos de coronavirus humanos y la cantidad de rayos del sol que se necesitan para que la prueba de un resultado negativo. Los valores se tomaron desde el 17 de abril de 2020 hasta el 10 de julio de 2020, y durante ese tiempo los investigadores descubrieron que en cuatro virus había una correlación negativa con la cantidad de los rayos luz del sol y el porcentaje que daba resultados positivos a la prueba.
Estados Unidos tiene cuatro regiones censales, que los investigadores utilizaron para categorizar los hallazgos. La región del censo 1 incluye los estados del noreste que limitan al sur con Pensilvania. La región del censo 2 incluye los estados del centro norte que limitan al sur con Illinois, Indiana, Ohio, Missouri y Kansas.
La región del censo 3 incluye los estados del sur que limitan al oeste con Texas y al este con la costa atlántica de Florida. La región del censo 4 es la costa oeste, rodeada al este por Montana, Wyoming, Colorado y Nuevo México.
Los datos demuestran que las regiones 1 y 2 del censo tuvieron una correlación negativa con la exposición a los rayos del sol (lo que significa que los rayos del sol redujeron la infección por coronavirus), mientras que las regiones 3 y 4 tuvieron una correlación positiva mínima que no fue estadísticamente significativa. La diferencia en estas dos áreas se podría explicar por el calor durante esos meses, lo que hizo que las personas usaran el aire acondicionado dentro de casa.
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Deficiencia de vitamina D en niveles pandémicos
A medida que más investigaciones demuestran la eficacia de la vitamina D contra las enfermedades infecciosas y el COVID-19, es importante comprender que la deficiencia de vitamina D en todo el mundo también se encuentra a nivel pandémico.
Se han encontrado deficiencias en países del hemisferio sur donde se suponía que había suficiente exposición a la radiación ultravioleta para prevenir una deficiencia de vitamina D. Sin embargo, es probable que existan varios factores que influyen en esta diferencia. Por ejemplo, los autores de una revisión de la literatura descubrieron que las mujeres de Medio Oriente tenían un nivel de vitamina D muy bajo.
Sin embargo, debido a que muchas personas en los países del Medio Oriente practican el islam y las mujeres no salen a la calle a menos que estén completamente cubiertas, se dificulta la capacidad de la piel para producir vitamina D con la exposición a los rayos del sol.
Otro estudio implicó el uso de un Programa internacional de estandarización de vitamina D dirigido por los Institutos Nacionales de Salud para evaluar 14 estudios de población. Los datos demostraron que, independientemente de la edad, el origen étnico o el margen, el 13 % de los 55 844 europeos que fueron evaluados tenían niveles séricos de vitamina D inferiores a 12 ng/ml (30 nmol/L).
Cuando se utilizó un nivel alternativo de deficiencia, menos de 20 ng/ml (50 nmol/L), la prevalencia fue aún mayor, con un 40.4 %. Además, cuando el grupo se subdividió por etnia, los datos demostraron que las personas de piel oscura tenían un nivel de deficiencia mucho más alto que las poblaciones blancas, con tasas de hasta 71 veces más altas.
Los consejos sobre los protectores solares contradicen el mensaje sobre la vitamina D
Aunque cada vez se reconoce más la importancia de la vitamina D, algunos médicos no aconsejan la exposición a los rayos del sol ni los suplementos de vitamina D. Por ejemplo, el Dr. Pieter Cohen, especialista en medicina interna en Cambridge Health Alliance en Massachusetts, aún no ha aceptado la importancia de la vitamina D.
En una entrevista con Today, Cohen le dijo al reportero que no les recomendaba a las personas hacerse una prueba para conocer sus niveles de vitamina D, y dijo:
“No recomendamos la vitamina D a nuestros pacientes y no existe evidencia de que la vitamina D desempeñe un papel en la prevención o el tratamiento del COVID-19. En el futuro, podríamos tener evidencia que evolucione y nos haga cambiar de opinión, pero por el momento, este no es el caso.
Desanimaría a cualquier persona a pensar que cualquier tableta va a resolver este problema. La clave será el distanciamiento social, lavarse las manos [y] usar un cubrebocas".
Debido a que la exposición a los rayos del sol y los suplementos de vitamina D son relativamente inofensivos y tienen pocos o ningún efecto secundario cuando se hacen de manera adecuada, parece buena idea recomendarles a las personas que no se hagan la prueba ni tomen ningún suplemento por el beneficio potencial que podrían recibir.
El consejo de usar protector solar mientras se expone de manera "casual" también es médicamente incorrecto, ya que el protector solar filtra los rayos ultravioletas que estimulan la producción de vitamina D en la piel.
Para que la exposición a los rayos del sol sea beneficiosa, su piel debe estar desprotegida y debe asegurarse de no quemarse. Manténgase alejado hasta que su piel se torne de un color rosa claro y luego cúbrase con playeras de mangas largas y pantalones.
Las pruebas positivas y las muertes disminuyeron durante el verano
La mayoría de las enfermedades respiratorias disminuyen durante el verano. Aunque es posible contraer un resfriado o una gripe, es menos probable hacerlo durante los meses de verano. Desde mediados de julio, los indicadores de los CDC demuestran que las enfermedades similares al COVID y las pruebas positivas han disminuido en los Estados Unidos.
Los CDC también recopilan datos para tener un conteo de la cantidad de muertes por COVID-19 y neumonía, excluyendo la gripe. La primera muerte en esta categoría se registró el 22 de febrero de 2020.
La cantidad alcanzó su punto máximo la semana del 18 de abril de 2020, con 7 292 muertes. A finales de junio, la cantidad disminuyó a 1 530. Sin embargo, como demuestra un nuevo informe de los CDC, el 94 % de las muertes atribuidas al COVID-19 ocurrieron en personas que tenían otras afecciones de salud y causas contribuyentes.
Y en solo el 6 % de las muertes, el COVID-19 fue la única causa en el certificado de defunción. La diferencia entre una persona que muere POR COVID-19 versus CON COVID-19, es que muchas personas con un resultado positivo son asintomáticas y por lo tanto no califican como un “caso” de COVID-19 sino, más bien, como prueba positiva.
Algunas de las principales enfermedades contribuyentes fueron paro cardíaco, insuficiencia cardíaca o renal, demencia vascular o no especificada, influenza y neumonía. Además de que los niveles de vitamina D incrementan durante los meses de verano, existen otros factores que influyen en la transmisión de enfermedades infecciosas y ralentizan la propagación. Por ejemplo, la influenza se ve afectada tanto por la temperatura como por la humedad.
En un estudio realizado en Nueva Gales del Sur, Australia, los investigadores descubrieron una conexión similar entre la humedad y el COVID-19. Se pronosticó que una disminución del 1 % en la humedad incrementaría la cantidad de casos en un 6.11 %. En un estudio separado, la adición de un humidificador en el dormitorio demostró una disminución en la supervivencia del virus de la influenza, del 17.5 % al 31.6 %.
Durante el invierno, las personas también pasan más tiempo dentro de casa, en espacios cerrados con menos ventilación. Lo mismo se puede decir durante el verano, cuando la gente busca alivio en dentro de casa con el aire acondicionado. Durante los meses de otoño e invierno, las escuelas imparten clases normales, lo que se ha relacionado con una mayor transmisión de virus respiratorios.
Marc Lipsitch, profesor de epidemiología y director de la Escuela de Salud Pública T.H Chan de Harvard y miembro del Centro de Dinámica de Enfermedades Transmisibles señala:
"Es posible que la condición del sistema inmunológico de una persona promedio sea peor en invierno que en verano. Una hipótesis se ha centrado en la melatonina, que tiene algunos efectos inmunológicos y está modulada por el fotoperíodo, que varía según la estación. Otra prueba con más evidencia, es que los niveles de vitamina D, que dependen de la exposición a la luz ultravioleta (mayor en verano) modulan nuestro sistema inmunológico de manera positiva".
Combine estas estrategias para mejorar su nivel de vitamina D
Optimizar la vitamina D es una estrategia poderosa y beneficiosa para proteger su salud. En mi informe gratuito sobre la vitamina D, desarrollé un recurso que puede usar para compartir y persuadir a otras personas. La única forma en que conocerá su nivel de vitamina D es al hacer un análisis. GrassrootsHealth tiene un kit de prueba que es fácil de usar y que le brinda los resultados en la comodidad de su hogar.
Encontrará una calculadora en GrassrootsHealth.net que utiliza su peso actual, nivel sérico y el consumo diario de suplementos para calcular la cantidad de vitamina D3 que necesita para alcanzar el nivel de vitamina D deseado. Sin embargo, aunque es fundamental, no es lo único disponible para ayudar a proteger su salud.
Es muy importante volverse metabólicamente flexible para ayudar a reducir la gravedad de una infección por COVID-19. El paso más importante para lograr y preservar la flexibilidad metabólica es disminuir el número de veces en que consume alimentos durante el día.
Al hacerlo, disminuye la resistencia a la insulina. En mi libro Contra el cáncer, hablo de cómo ser metabólicamente flexible, incluyendo el ayuno intermitente y la cetosis nutricional cíclica.
El uso del hidrógeno molecular es otra estrategia, ya que es un poderoso antioxidante y un agente antiinflamatorio. La quercetina y el zinc pueden aminorar aún más el riesgo. La quercetina actúa como ionóforo de zinc y tiene sus propios efectos antivirales.
Uno de los mejores tratamientos en la actualidad es el Protocolo MATH +. desarrollado por primera vez por Front Line Covid-19 Critical Care Alliance. Está diseñado para usarse cuando alguien está hospitalizado y necesita suministro de oxígeno. Descubra más sobre cada una de estas estrategias en el artículo "Cómo solucionar la crisis de COVID en 30 días".