El cuerpo humano es un sistema complejo con una estructura de eliminación única para deshacerse de los productos de desecho y equilibrar los niveles de agua. El sistema urinario es una parte que puede proporcionar advertencias sobre su estado de salud general.
Este sistema se encuentra formado por órganos, músculos y nervios que trabajan juntos para crear orina, almacenarla y luego expulsarla del cuerpo.
Los riñones crean la orina, mientras que los dos uréteres transportan la orina a la vejiga. Los uréteres se encuentran en la parte superior de la vejiga en ambos lados. En la parte inferior existe un músculo del esfínter que conduce a la uretra, que a su vez extrae la orina del cuerpo.
Después de metabolizar los alimentos, se eliminan los productos de desecho. Junto con los pulmones, piel e intestinos, el sistema urinario equilibra dichos químicos y el agua. Un adulto sano eliminará aproximadamente 1.5 litros de orina al día, ya que depende de la cantidad de alimentos y líquidos que consuma, del sudor y la respiración y de cualquier medicamento que consuma.
La urea es uno de los productos de desecho creados con la metabolización de los alimentos que contienen proteínas. Aunque la función de la orina es eliminar los productos de desecho metabólicos, hay quienes consideran que la orina ofrece propiedades medicinales.
La antigua práctica de la ‘Fuente Dorada’
La práctica de la orinoterapia o de su aplicación en la piel se ha utilizado alrededor del mundo durante miles de años. El Shivambu es una práctica hindú que tiene más de 5000 años de antigüedad, en la cual se considera que beber orina rejuvenece a las personas.
Culturalmente, el acto medicinal de la orinoterapia se practicó en Egipto, China, Tailandia y durante el imperio azteca. Plinio el Viejo la utilizaba tópicamente para tratar llagas, quemaduras y picaduras de escorpión.
En muchos de los resultados de investigación de la orinoterapia, Jutta M. Loeffler, investigador de la Universidad de Londres, redactó en 2010 en The Pan African Medical Journal: "Parece que no existe prácticamente nada que la orina no pueda curar".
En su editorial, explicó los hallazgos de los indicios de una conspiración por parte del sistema médico y la industria farmacéutica para mantener en secreto el conocimiento de "las fantásticas propiedades curativas de la orina".
Aunque se han realizado algunos estudios que demuestran una falta de efectos negativos por consumir pequeñas cantidades de orina, Loeffler señala que la orina es principalmente agua. Ya que contiene 25 gramos de urea, 1 gramo de ácido úrico y 1,5 gramos de creatinina excretada por día.
Asimismo, existe una variedad de electrolitos, fosfatos y ácidos orgánicos, con únicamente pequeñas cantidades de proteína, muchas de las cuales es albúmina. En el siglo XIX, se utilizó la aplicación de orina de vaca para el edema o la ascitis, ya que la urea es un potente diurético conocido. Loeffler redacta lo siguiente:
"Puede haber situaciones poco frecuentes en las que la orina sea el líquido más limpio que se pueda derramar sobre una herida infectada, o el único líquido para beber cuando una persona se encuentra enterrada debajo de los escombros o se pierde en el mar durante días, pero la mayoría de las veces existen mejores y deliciosas maneras para mejorar la salud de una persona".
Últimamente, existe un grupo de personas en el Urine Therapy Meetup Group que considera que el consumo y uso de orina ofrece beneficios para la salud. Los miembros se reúnen de manera mensual en la biblioteca pública de Boulder Colorado. Los nuevos miembros son introducidos a la práctica diaria de la orinoterapia conocida como Shivambu.
Algunos miembros del grupo han compartido su experiencia con los medios y describen que beber o aplicar tópicamente su orina durante años ha eliminado el eczema. Otros miembros han descrito los métodos que utilizan, pero ninguno de los beneficios que le atribuyen. Tal como se informó en Newsweek, el Dr. Andrew Thornber tuvo una entrevista con la BBC y mencionó lo siguiente:
"La orina de una persona sana se encuentra conformada por un 95 % de agua, pero el otro 5 % son productos de desecho que el cuerpo se encuentra tratando de eliminar, como el potasio y el nitrógeno, que, si se encuentran en grandes cantidades en el cuerpo, pueden causar problemas”.
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¿La orina es estéril?
Evann E. Hilt, investigador del departamento de microbiología e inmunología de la Universidad de Loyola, informó en la conferencia de la American Society for Microbiology que la presencia de bacterias en la orina normalmente se encuentra en niveles mucho más bajos en las personas sanas. Esta información contradice la leyenda que menciona la esterilidad de la orina.
Hilt considera que esta historia se remonta a la década de 1950 cuando el epidemiólogo Edward Kass desarrolló un método de detección de infecciones del tracto urinario para sus pacientes antes de la cirugía.
Kass encontró que, al utilizar una prueba de orina durante el proceso junto con un límite numérico para el número de bacterias encontradas en menos de 100 000 unidades formadoras de colonias por milímetro de orina, se puede determinar si una persona tuvo una infección del tracto urinario.
La prueba fue considerada negativa cuando las bacterias cultivadas en el laboratorio no alcanzaron dicho umbral. Hilt considera que aquí se desarrolló la leyenda sobre la esterilidad de la orina en las personas sanas, ya que a los pacientes a menudo se les informaba que su orina era negativa para la infección y libre de crecimientos bacterianos.
El método de recolección de orina limpia se diseñó para reducir la cantidad de contaminación bacteriana a medida que las bacterias se trasladan a través de la uretra y se eliminan del cuerpo. Hilt utilizó una técnica más sensible para detectar menores niveles de bacterias, al evaluar las bacterias encontradas en las vejigas de 84 mujeres mediante una cateterización directa.
La mitad de estas mujeres mostraban síntomas del síndrome de vejiga hiperactiva, lo que causaba una micción muy recurrente. El equipo encontró que el 70 % de las muestras contenía bacterias; las mujeres con vejiga hiperactiva contaban con mayores tipos de bacterias, incluyendo cuatro especies encontradas únicamente en mujeres con este tipo de afección.
Los investigadores esperan que esto pueda ayudar a proporcionar tratamiento para el 15 % de las mujeres que sufren de vejiga hiperactiva, ya que muchas de ellas no encuentran alivio para tratar la enfermedad como un trastorno muscular.
Existen numerosas áreas en el cuerpo que no son estériles
Los resultados del trabajo de Hilt demostraron la falta de esterilidad de la orina y cambian la manera de ver las infecciones.
Sus resultados sugieren que existe una comunidad normal de bacterias que residen en la vejiga y pueden funcionar igual que las bacterias en el microbioma intestinal, en términos de las mezclas beneficiosas y perjudiciales de bacterias que existen en la misma área.
Los científicos han considerado durante mucho tiempo las diferentes áreas del cuerpo que también son estériles y que únicamente el tracto intestinal que abarca desde la boca hasta el ano contenía bacterias. Sin embargo, un estudio en el 2014 encontró que la placenta también alberga una comunidad de bacterias similares a las que se encuentran en la boca.
Los microbios no son patógenos, pero sus variaciones y composición pueden desencadenar un parto prematuro, el cual ocurre en el 10 % de los embarazos. Este estudio inicio por otro en el 2012 durante el cual un investigador encontró que la mayoría de los microbios abundantes en la vagina de una mujer embarazada eran diferentes a los encontrados en mujeres no embarazadas.
Sin embargo, los microbios no se encontraron en las heces del bebé durante su primera semana de vida. En otras palabras, durante el parto natural, el bebé no adquirió las bacterias de la vagina de su madre. La Dra. Kjersti Aagaard, obstetra de Baylor College of Medicine en Houston, Texas y autora principal de los estudios comentó lo siguiente:
"Si consideramos a la placenta como un conducto o facilitador de la comunicación madre-feto y no como una barrera, creo que nos abrimos a perspectivas muy interesantes sobre cómo hemos interpretado la biología del desarrollo en la actualidad".
En ausencia de enfermedad, también se considera que el cerebro es un órgano estéril. Sin embargo, un estudio publicado en el 2013 informó los hallazgos de alfa-proteobacterias en el cerebro de las personas, las cuales normalmente se encuentran en el suelo.
Los investigadores evaluaron si las personas con VIH podrían ser propensas a las infecciones cerebrales y, en cambio, encontraron que todos los cerebros evaluados contienen bacterias, independientemente si una persona tiene VIH o no. Este descubrimiento ilumina los caminos por recorrer antes de encontrar lo que se considera "normal".
El uso de urea tópica en la industria de los cosméticos
La piel es una barrera que protege al cuerpo de los elementos, ayuda a regular la temperatura y es importante para equilibrar los niveles de hidratación. Sin embargo, la alteración de su función se encuentra asociada con diferentes enfermedades de la piel, incluyendo la dermatitis atópica, la psoriasis y el eccema.
La urea es un componente que se encuentra en la orina y se utiliza en los factores de hidratación natural de la piel. Es importante para la preservación de la hidratación y la integridad.
En algunos casos, la urea también se añade a productos cosméticos para tratar los problemas de las uñas, como las uñas encarnadas. Ofrece propiedades queratolíticas, las cuales ayudan a eliminar el tejido muerto y favorecen la cicatrización de las heridas.
Aumenta la humedad en la piel al suavizar la queratina que une la capa superior de las células de la piel y actúa como un exfoliante. Las cremas de urea pueden adquirirse con o sin receta. Al mezclarse con otro producto, cambia su equilibrio ácido y disminuye la pérdida de humedad del producto.
De acuerdo con la Base de datos Skin Deep del Grupo del Trabajo Ambiental (EWG, por sus siglas en inglés), la urea recibió una puntuación de "3", lo que la coloca en el nivel más bajo de un cosmético moderadamente peligroso. El EWG señala que su uso se encuentra restringido en los cosméticos canadienses.
Los efectos secundarios del uso de cremas a base de urea incluyen ardor, picazón, enrojecimiento o irritación en el área. Si experimenta los efectos secundarios o estos se vuelven más intensos, como ampollas o descamación, se recomienda consultar a un médico inmediatamente.
Es probable que en la orina existan más sustancias químicas de las esperadas
Aproximadamente el 70 % de todos los medicamentos que consume se eliminan por medio de la orina, incluyendo los medicamentos de venta libre.
También se metabolizan y se excretan otras toxinas ambientales a través de los riñones, como el humo de tabaco, la contaminación y algunos compuestos alimenticios. De hecho, puede encontrar evidencia de estas toxinas al evaluar lo que se encuentra en su orina.
Un campo emergente de salud ambiental es la aducción del ADN, o el estudio de un segmento de ADN unido a una sustancia química que causa cáncer.
El método de medición consiste en utilizar muestras de orina para extraer la información y comprender los factores estresantes del ambiente en el cuerpo. En otras palabras, el consumo de orina lo expone nuevamente a segmentos de ADN unidos a sustancias químicas que causan cáncer y que su cuerpo elimina.
En un estudio que analiza la composición química de la orina humana, los científicos pasaron siete años para encontrar al menos 3079 compuestos detectados en la orina. Las bacterias conformaron 72 de estos, mientras que 2282 fueron metabolitos provenientes de la alimentación, medicamentos, cosméticos o exposición ambiental.
David Wishart, Ph. D., profesor de biología y ciencias de computación en la Universidad de Alberta, e investigador del estudio, comentó lo siguiente: “La orina es un biofluido increíblemente complejo. No considerábamos la existencia de tantos compuestos diferentes en nuestros inodoros".
Los compuestos en la orina se clasificaron en 230 químicos diferentes. Sin embargo, los investigadores redactaron lo siguiente:
"Dado que solo existen 356 clases de sustancias químicas en todo el metaboloma humano, esto ciertamente demuestra la enorme diversidad química que se encuentra en la orina.
El hecho de que tantos compuestos parezcan únicos para la orina probablemente se relacione con el hecho de que los riñones llevan a cabo un excelente trabajo al concentrar ciertos metabolitos de la sangre".
Se encontró hasta un 93 % de gilosofato en la orina
El glifosato es un químico peligroso conocido por haber aumentado en las muestras de orina. Investigadores de la Escuela de Medicina de la Universidad de California en San Diego, encontraron que la exposición humana aumentó aproximadamente un 500 % desde la introducción de cultivos transgénicos en el suministro de alimentos.
En otro estudio encargado por la Asociación de Consumidores Orgánicos, se llevó a cabo un proyecto de prueba pública por la Universidad de California en San Francisco y se descubrió hasta un 93 % de glifosato en las muestras de orina recolectadas en el 2015.
Este fue un proyecto único, ya que fue apoyado por el público, el cual pago por el análisis de las muestras de orina y agua. Los primeros resultados fueron de las primeras 131 muestras de orina analizadas. Ronnie Cummins, director internacional de la Asociación de Consumidores Orgánicos, comentó lo siguiente:
"Si los consumidores tienen dudas sobre el grado de envenenamiento por el Roundup de Monsanto, los resultados de estas pruebas deberían eliminar todo rastro de duda.
Los resultados de estas pruebas resaltan el fracaso masivo de las agencias reguladoras de los Estados Unidos, incluyendo la EPA, el USDA y la FDA, incluso mientras continúan perpetuando el mito de que la exposición a niveles bajos de glifosato es inofensiva".
Otro estudio, publicado el año anterior encontró:
“El glifosato fue significativamente mayor en personas que consumen [alimentos] convencionales comparados con personas que consumen [alimentos] orgánicos.
Además, se agruparon los residuos de glifosato en la orina de acuerdo con el estado de salud humana. Las personas con enfermedades crónicas mostraban una mayor cantidad de residuos de glifosato en la orina que las personas sanas".
El consumo de orina contaminada con glifosato solo incrementa la exposición celular a un químico que la Organización Mundial de la Salud denomina como probablemente cancerígeno para los seres humanos. A menos que consuma alimentos orgánicos, libres de transgénicos o cultive sus propios alimentos, es probable que existan niveles de glifosato en su orina.
Mantenerse hidratado fomenta la salud del sistema urinario
Además de consumir productos de desecho que su cuerpo está tratando de eliminar, beber orina también puede causar deshidratación. Incluso los niveles bajos de deshidratación pueden provocar dolores de cabeza, letargo y estreñimiento.
El cuerpo cuenta con un sistema sofisticado que depende del consumo de líquidos y alimentos para reemplazar el agua perdida por la respiración, sudoración, orina y defecación.
El consumo diario de agua es muy importante para una salud óptima, pero muchas personas han errado al renunciar al agua por otro tipo de líquidos. Las bebidas dulces, jugos, sodas y bebidas deportivas pueden haber reemplazado al agua en dicho cambio de líquidos.
En un estudio de Harvard, los investigadores encontraron que más de la mitad de los niños en los Estados Unidos muestran deshidratación crónica, lo que puede desarrollar repercusiones en la salud y el rendimiento académico. Dado que el 73 % del cerebro es agua, al estar deshidratado, el cerebro se encoge de volumen. Esto puede alterar la función cerebral y el estado de ánimo.
Las necesidades corporales de líquidos pueden variar durante el día y de un día a otro, por lo que el color de la orina es una guía importante para mantenerse hidratado.
La orina concentrada de color oscuro es una señal de que sus riñones se encuentran tratando de retener líquidos para mantener sus funciones corporales, la cual es una buena señal para incrementar el consumo de agua.
Idealmente, es necesario que la orina presente un color amarillo pajizo claro. Es importante escuchar al cuerpo, por medio de los niveles de sed y el color de la orina. La fatiga o el mal humor, también indican la necesidad de incrementar el consumo de agua. En promedio, se recomienda ir al baño de siete a ocho veces al día.