La vitamina C puede disminuir la mortalidad por sepsis severa

Análisis escrito por Dr. Joseph Mercola Datos comprobados

cura de vitamina C contra la sepsis

Historia en Breve

  • La sepsis es un último esfuerzo del sistema inmunológico para combatir una infección en el cuerpo; sin embargo, puede crear falla en múltiples órganos y la muerte, a menos que se trate de inmediato
  • Si bien los virus, hongos y parásitos tienen la capacidad de desencadenar la sepsis, las infecciones bacterianas son la causa más común. Los tipos más comunes de infección que desencadenan la sepsis son las infecciones de las vías respiratorias y urinarias
  • En los Estados Unidos, alrededor de un 1 millón de personas contraen sepsis al año y fallecen hasta la mitad de ellas. La razón tras la elevada tasa de mortalidad de la sepsis se debe a que pasa desapercibida con bastante frecuencia, ya que muchas personas no están familiarizadas con sus signos y síntomas. Además, es notoriamente difícil de tratar
  • En 2017, un médico de cuidados intensivos anunció el descubrimiento de una forma simple y económica de tratar la sepsis, por medio de un cóctel por vía intravenosa de vitamina C y tiamina en combinación con hidrocortisona
  • Un estudio realizado en 2019 que utilizó vitamina C solo encontró que disminuía el riesgo de mortalidad en pacientes con sepsis grave y redujo la cantidad de días que pasaron en cuidados intensivos y estadía general en el hospital

Una de las principales causas de muerte en los hospitales estadounidenses es algo con lo que muchas personas aún no están familiarizadas; es decir, septicemia (sepsis o shock séptico).

Este problema de salud, también conocido como envenenamiento de la sangre, es un último esfuerzo del sistema inmunológico para combatir una infección en el cuerpo, lo que puede causar una falla de múltiples órganos y muerte, a menos que se trate de inmediato. Según explicó el Instituto Nacional de Ciencias Médicas Generales:

“El cuerpo libera químicos inmunológicos en la sangre para combatir la infección. Esos químicos desencadenan una inflamación generalizada, que crea coágulos sanguíneos y filtración en los vasos sanguíneos. Como resultado, puede influir en el flujo sanguíneo y privar a los órganos de nutrientes y oxígeno, así como dañar los órganos.

En casos severos, pueden fallar uno o más órganos. En los peores casos, la presión sanguínea baja, el corazón se debilita y el paciente atraviesa una cadena de problemas que pueden resultar en un shock séptico. Una vez que esto sucede, el paciente podría experimentar falla de múltiples órganos (pulmones, riñones, hígado) con rapidez y morir".

Si bien, los virus, hongos y parásitos tienen la capacidad de provocar sepsis, las infecciones bacterianas son la causa más común. Los tipos más comunes de infección que desencadenan la sepsis son las infecciones del tracto respiratorio y urinario. Dicho lo anterior, la investigación ha demostrado un auge en el número de infecciones por sepsis causadas por hongos.

El problema es que, a menudo la sepsis es ignorada ya que muchos no están familiarizados con sus signos y síntomas. Además, es notoriamente difícil de tratar. La detección temprana y el tratamiento rápido pueden brindar resultados exitosos.

El tratamiento más costoso en los Estados Unidos es el de la sepsis

En los Estados Unidos, alrededor de 1 millón de habitantes contraen sepsis al año y, como resultado, muere hasta la mitad.

Según los datos de dos cohortes hospitalarias, entre el 34.7 % y 55.9 % de los pacientes de los Estado Unidos que fallecieron en hospitales entre 2010 y 2012 presentaron sepsis en el momento de su muerte (según el lugar donde estaba hospitalizada la población de pacientes).

Ahora, los expertos solicitan que reconozcan la sepsis como una causa de muerte, con la esperanza de que esto se traduzca en mejores guías de práctica clínica. De igual manera, destacan la importancia de concientizar a la comunidad y las salas de urgencias. Con el fin de crear consciencia, se estableció el 13 de septiembre como "Día Mundial de la Sepsis".

El tratamiento convencional, que generalmente se centra en altas dosis de antibióticos que contribuyen aún más a la creación de bacterias resistentes a los antibióticos, también es una enorme carga financiera.

Un informe del gobierno de los Estados Unidos publicado en 2016 encontró que la sepsis era el padecimiento con el tratamiento más costoso en los Estados Unidos, con un gasto de 23 600 millones de dólares en costos por servicios de atención médica al año.

La buena noticia es que existe un tratamiento económico que ha demostrado ser muy efectivo contra la sepsis. La mala noticia es que aún son pocos los hospitales que lo han adoptado como estándar de atención.

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Mezcla de vitamina C: una cura económica para la sepsis

En 2017, hubo noticias sobre un médico de cuidados intensivos que afirmaba haber descubierto una forma simple y económica de tratar la sepsis por medio de un cóctel por vía intravenosa (IV) de vitamina C y tiamina (vitamina B-1) en combinación con hidrocortisona esteroide.

El protocolo preciso utilizado fue 200 mg de tiamina cada 12 horas, 1 500 mg de ácido ascórbico cada seis horas y 50 mg de hidrocortisona cada seis horas.

Este médico, Dr. Paul Marik, Jefe de medicina pulmonar y de cuidados intensivos en el Hospital General Sentara Norfolk en el este de Virginia, publicó un pequeño estudio clínico retrospectivo, antes y después, que mostraba que suministrarles a los pacientes con sepsis este simple cóctel IV durante dos días reducía su tasa de mortalidad de un 40 % a un 8.5 %.

Desde entonces, el Hospital General Sentara Norfolk, donde trabaja Marik, ha convertido el protocolo en su estándar de atención para la sepsis, y otros han comenzado a seguir su ejemplo. Por desgracia, muchos hospitales aún están retrasados, esperando que se completen más ensayos clínicos.

Esto a pesar de que el tratamiento es inofensivo por sí solo, lo que significa que no agravará aún más el estado del paciente. Una revisión del 2018 sobre la investigación disponible presenta un modelo hipotético del por qué y cómo funciona realmente el protocolo Marik, al discutir cómo estos tres componentes impactan en los procesos biológicos involucrados en la sepsis.

Como señaló esa revisión, la recepción del tratamiento ha sido mixta, y algunos líderes de cuidados intensivos lo aceptaron mientras que otros no lo han aplicado en lo absoluto. Esto significa que su capacidad de recibir este tratamiento potencialmente vital depende del hospital donde sea internado. 

Por otro lado, "el interés por esta combinación de medicamentos contra la sepsis ha crecido rápidamente" desde la publicación de los resultados del estudio inicial de Marik, y ahora se realizan estudios mucho más amplios.

Uno es el estudio VICTAS (vitamina C, tiamina y esteroides para la sepsis), patrocinado por la Universidad Emory, que espera contar con la participación de 2 000 personas. La fecha de finalización prevista para este estudio es octubre de 2021, aunque los resultados preliminares podrían estar disponibles a partir de diciembre de 2019.

Qué hacer si su médico se niega a aplicarle este protocolo

Si su médico se niega a considerar el protocolo de Marik de improviso, podría convencerlo de revisar los estudios recientes citados aquí que demuestran que sí funciona.

De forma alternativa, puede acudir directamente con PubMed y escribir "vitamina C" y "sepsis" en el buscador, así podría obtener una lista de las investigaciones disponibles.

Estos artículos pueden descargarse completamente gratis. Espero que nunca necesite acceder a esta información, pero si lo hace, puede imprimirlos y utilizar los datos para convencer a su equipo médico de que utilice estas estrategias sencillas para salvar vidas. Si se niegan, le sugiero encarecidamente tomar el control de la situación y buscar otro médico u hospital que sí lo haga.

La vitamina C por sí sola puede reducir el riesgo de mortalidad

En fechas muy recientes, se publicó un estudio dirigido por el Dr. Alpha "Berry" Fowler en la edición de octubre de 2019 de JAMA. El estudio no refleja el protocolo Marik, ya que solo utilizó vitamina C IV, pero sus resultados siguen siendo muy interesantes.

Fowler y su equipo buscaron investigar la efectividad de la infusión de vitamina C en los puntajes de falla orgánica, biomarcadores de inflamación y lesión vascular en pacientes con sepsis severa e insuficiencia respiratoria aguda.

Lo curioso es que, aunque la infusión de vitamina C no tuvo un efecto detectable en estos resultados, las personas que recibieron el tratamiento tuvieron mayor probabilidad de supervivencia y pasaron menos tiempo en el hospital. Según informó NPR:

“Si lee el resumen del estudio, la vitamina C no beneficio a los pacientes. Pero, si analiza con detenimiento el estudio, descubrirá que las personas que recibieron el tratamiento tenían muchas más probabilidades de sobrevivir... El problema proviene de la forma en que se diseñó el estudio".

Si bien, la vitamina C por sí sola no tuvo impacto en las puntuaciones de falla orgánica y los biomarcadores de inflamación, cuando los investigadores observaron 46 puntos finales secundarios, descubrieron que la tasa de mortalidad para el grupo de tratamiento disminuyó del 46 % al 30 %. Como señaló NPR:

"Si la muerte fuera el resultado principal del estudio, este habría sido muy significativo. La conclusión podría respaldar firmemente la hipótesis de que la vitamina C es un tratamiento eficaz para la sepsis.

Pero, hay una trampa. Dado que Fowler y sus colegas analizaron 46 puntos finales secundarios, es probable que algo surja de la nada y que sea estadísticamente significativo. Es como si dieran 46 mordiscos en una manzana para encontrar algún significado...

Desde luego que, lo que realmente les importa a los pacientes, es... si viven o mueren. Fowler comenta para NPR que ahora lamenta su decisión de seleccionar un resultado con mayor probabilidad de demostrar un beneficio...

Aunque ahora está sujeto a las reglas del diseño experimental para minimizar los resultados de la mortalidad, en lo personal experimenta una sensación de éxito. 'Todos gritamos emocionados debido a lo que encontramos', indica".

El equipo de Fowler también descubrió que, en promedio, las personas que recibieron vitamina C habían pasado tres días menos en la unidad de cuidados intensivos para el día 28, en comparación con el grupo del placebo (7 días en comparación con 10 días).

Para el día 60, el grupo de tratamiento también había pasado 7 días menos en el hospital en general, 15 días en comparación con 22 días.

La vitamina C, la tiamina y los esteroides pueden tener efectos sinérgicos

Cuando se le pidió a Marik un comentario sobre el estudio de Fowler, señaló que la vitamina C y los corticosteroides podrían tener un efecto sinérgico. En otras palabras, en realidad el estudio de Fowler no puede utilizarse para juzgar la efectividad de la combinación de vitamina C, tiamina y esteroides, ya que solo utilizó uno de los tres ingredientes.

La vitamina C es conocida por su capacidad para prevenir y tratar enfermedades infecciosas por sí sola. La gripe, encefalitis y sarampión se han tratado con éxito con altas dosis de vitamina C, y las investigaciones anteriores han demostrado que puede reducir eficazmente las citocinas proinflamatorias y proteína C reactiva.

Para investigar el mecanismo de acción de la vitamina C en la sepsis con y sin esteroides, Marik, en colaboración con John Catravas, Ph. D., investigador de farmacología en la Universidad Old Dominion, y otros, realizaron un estudio en el que se analizaron células endoteliales del tejido pulmonar expuesto al lipopolisacárido, un tipo de endotoxina presente en pacientes con sepsis, en ausencia o presencia de ácido ascórbico e hidrocortisona.

Curiosamente, ya sea la vitamina C, o el esteroide, se administraron por separado, se produjo una mejora muy baja en la función de la barrera endotelial. Sin embargo, cuando se administraron combinados, la infección se erradicó con éxito y se reestableció el funcionamiento celular normal.

Además, es importante agregar la tiamina. No solo se requiere tiamina para el metabolismo de algunos de los metabolitos de la vitamina C, el síndrome de deficiencia de tiamina (beriberi) tiene muchas similitudes con la sepsis, y la deficiencia de tiamina es relativamente común en los pacientes muy enfermos.

Los estudios también han demostrado que la tiamina puede ser útil para una larga lista de enfermedades y trastornos, incluyendo los trastornos mitocondriales, insuficiencia cardíaca, delirio, fatiga tiroidea y enfermedad de Hashimoto (un trastorno autoinmunológico de la tiroides).

Estos y otros efectos sobre la salud pueden ayudar a explicar por qué la tiamina funciona tan bien junto con la vitamina C e hidrocortisona contra la sepsis.

Sin embargo, Marik dijo para NPR que el estudio de Fowler destacaba dos cuestiones importantes. Primero, que no hay efectos secundarios de la infusión de vitamina C en pacientes muy enfermos, y segundo, que había menor riesgo de mortalidad. "Puede debatir todos los matices estadísticos, pero eso es lo que demostró el estudio", indicó Marik para NPR.

Una posible contraindicación

Si bien, la administración de vitamina C y tiamina es increíblemente segura, puede estar contraindicada si es deficiente en glucosa-6-fosfato deshidrogenasa (G6PD), que es un trastorno genético. La G6PD es una enzima que necesitan los glóbulos rojos para mantener la integridad de la membrana.

Las altas dosis de vitamina C IV son un prooxidante fuerte, y administrar un prooxidante a una persona deficiente en G6PD puede causar la ruptura de los glóbulos rojos, lo que podría tener consecuencias desastrosas.

Por fortuna, la deficiencia de G6PC es relativamente poco común y puede comprobarse. Las personas de ascendencia mediterránea y africana tienen mayor riesgo de ser deficientes en G6PC. Se cree que la deficiencia de G6PD en el mundo puede afectar a 400 millones de personas, y en los Estados Unidos, se estima que la padecen 1 de cada 10 hombres afroamericanos.

Conozca los signos y síntomas de la sepsis

Si tiene sospecha, una de las medidas más importantes que puede tomar para proteger su salud es reconocer los síntomas de la sepsis y buscar atención médica inmediata.

Es importante no auto diagnosticarse. En cambio, debe comunicarle sus inquietudes a un profesional médico para que pueda realizar las pruebas y tratamiento adecuados. Los signos y síntomas comunes de sepsis incluyen los siguientes.

Muchos de estos síntomas pueden confundirse con un resfriado severo o gripe. Sin embargo, tienden a desarrollarse mucho más rápido de lo normal.

Fiebre elevada con escalofríos y temblores

Frecuencia cardíaca rápida (taquicardia)

Frecuencia respiratoria rápida (taquipnea)

Nivel inusual de sudoración (diaforesis)

Mareos

Confusión o desorientación

Problemas de dicción

Diarrea

Dificultad para respirar, falta de aire

Dolor muscular severo

Baja producción de orina

Piel fría y húmeda

Erupciones cutáneas

Náuseas o vómito

La Sepsis Alliance recomienda el uso del acrónimo TIME para recordar algunos de los síntomas más comunes:

  • T: ¿Mayor o menor TEMPERATURA de lo normal?
  • I: ¿Ha experimentado alguna señal de INFECCIÓN recientemente?
  • M: ¿Ha experimentado cambios en su estado MENTAL, como confusión o somnolencia excesiva?
  • E: ¿Siente algún dolor o sufrimiento EXTREMO o que se va a morir?

Síndrome de postsepsis

Aunque algunas personas se recuperarán de la sepsis por completo, para muchas personas los problemas no terminan con el alta del hospital. Los sobrevivientes podrían padecer las consecuencias físicas, psicológicas o neurológicas por el resto de sus vidas.

Para algunos sobrevivientes, su función inmunológica podría permanecer deprimida hasta un año después de su recuperación, lo que puede generar infecciones recurrentes y frecuentes.

La combinación de síntomas se llama síndrome de postsepsis y, por lo general, dura entre 6 y 18 meses. Los síntomas del síndrome de postsepsis pueden incluir:

Letargo (cansancio excesivo)

Cambios en la sensación periférica

Infecciones repetidas en el sitio original o nueva infección

Menor movilidad

Debilidad muscular

Dificultad para respirar

Dolores en el pecho

Inflamación de las extremidades

Dolores articulares y musculares

Depresión, cambios en el estado de ánimo, ansiedad o tristeza

Pérdida de cabello

Piel y uñas secas

Cambios en el sentido del gusto

Pérdida de apetito

Cambios en la visión

Dificultad para tragar

Mala función renal

Sensación de frio

Sudoración excesiva

Trastorno de estrés postraumático

Recuerdos y pesadillas

Mala capacidad de concentración y confusión mental

Insomnio

Pérdida de la memoria a corto plazo

No existe un tratamiento específico para el síndrome de postsepsis, pero la mayoría mejora con el tiempo. Sepsis Trust del Reino Unido recomienda controlar los síntomas individuales y apoyar la salud óptima a medida que se recupera.

No todos los profesionales médicos conocen el síndrome de postsepsis, por lo que podría ser útil hablar sobre sus síntomas y pedir ser derivado con un profesional que pueda ayudarle a controlar sus problemas mentales, físicos y emocionales.

Cómo reducir su riesgo de sepsis

De nuevo, una de las razones por las que la sepsis puede ser tan mortal es debido a que, por lo general las personas no sospechan de su presencia, y cuanto más espere para tratarla, podría ser más mortal.

Si desarrolla una infección, debe mantenerse alerta a los síntomas de sepsis y, si se manifiestan, buscar atención médica inmediata. Incluso, los profesionales de la salud podrían ignorar los signos y retrasar el tratamiento.

Si bien, estos profesionales tienen la responsabilidad de prevenir infecciones que podrían volverse sépticas y educar a los pacientes sobre las señales de advertencia de sepsis, podría disminuir su propio riesgo al:

Tratar de inmediato las infecciones del tracto urinario (ITU). Las ITU son el segundo tipo más común de infección, y una cuarta parte de los casos de sepsis están relacionados con las ITUs.

En general, el tratamiento convencional involucra a los antibióticos, pero la investigación demuestra que las infecciones urinarias causadas por E. coli que comprenden el 90 % de todas las infecciones urinarias, pueden tratarse con éxito con D-manosa, un azúcar natural que está muy relacionado con la glucosa.

Para obtener más información, consulte mi artículo anterior "Ensayo clínico confirma que la D-Mannosa es efectiva en la prevención de infecciones del tracto urinario".

Limpiar de forma adecuada las heridas de la piel. Alrededor de 1 de cada 10 casos de sepsis es debido a infecciones de la piel, por lo que siempre debe tomarse el tiempo para limpiar y cuidar de forma adecuada sus heridas y raspones.

Lave la herida con agua y un jabón suave para limpiar la suciedad e impurezas, luego cubra con una venda estéril. Las personas con diabetes deben cuidar muy bien sus pies para evitar infecciones riesgosas.

Cuidar cualquier enfermedad crónica que afecte su riesgo de sepsis. Las investigaciones han encontrado que algunas de las enfermedades que elevan el riesgo podrían incluir a la enfermedad pulmonar crónica, enfermedad renal crónica, diabetes, derrame cerebral y enfermedad cardiovascular.

Evitar morderse las uñas. Un estudio encontró que el 46.9 % de los participantes se mordía las uñas. Exponer la delicada piel por debajo de las uñas, ya sea por medio de la boca o medio ambiente, puede aumentar el riesgo de infección.

Evitar infecciones en los hospitales. Al visitar un centro de atención médica, asegúrese de lavarse las manos y recordarle a los médicos y enfermeras que se laven las suyas (o cambien sus guantes) antes de tocarlo o higienizar cualquier equipo que utilicen al atenderlo.

Si tiene que someterse a una colonoscopia u otra prueba con un periscopio médico flexible, recuerde comunicarse para preguntar cómo los limpian y qué tipo de solución de limpieza utilizan.

Si la respuesta es glutaraldehído (marca Cidex), busque otro hospital o clínica que utilice ácido peracético. Al hacer esta investigación preliminar podría disminuir significativamente su riesgo de contraer una infección debido a un periscopio contaminado.

+ Fuentes y Referencias